BAGDAD.- Los inspectores de armas de la ONU visitaron el jueves un laboratorio de producción de vacunas para animales y una fábrica de municiones cerca de Bagdad, en el segundo día de búsqueda de presuntas armas de exterminio masivo en Iraq, tras una pausa de cuatro años.
Una caravana de cuatro vehículos que transportaban a los inspectores salió de la sede de la ONU en las afueras de Bagdad a las 8:30 am (0530 GMT) y se dirigió al laboratorio del gobierno en el área de Dora, en el sur de la capital.
Otro equipo fue al complejo Nasr (Victoria) en el área Taji, a unos 25 kilómetros al norte de la capital donde hay fábricas que producen municiones convencionales y maquinarias pasadas.
Ambos equipos, que estuvieron acompañados por funcionarios iraquíes, entraron rápidamente en las instalaciones.
Los dos lugares han sido mencionados por Estados Unidos en los últimos meses como sospechosos de estar dedicados a la producción de armas químicas y biológicas.
Melissa Fleming, portavoz del organismo de monitoreo de la ONU, UNMOVIC, y de la Agencia Internacional de Energía Atómica, dijo que las nuevas inspecciones seguirían un procedimiento similar a las del miércoles, pero declinó ofrecer más detalles.
’’Necesitamos inspecciones no anunciadas’’, dijo a periodistas antes de la salida de los inspectores.
Periodistas en decenas de vehículos persiguieron a los equipos de inspectores, pero guardias iraquíes les impidieron entrar en las instalaciones que iban a ser registradas.
Nuevos sitios de inspección
Los inspectores en el laboratorio en Dora parecían conocer bien la instalación, situada en un área agrícola rodeada de palmas. Primero caminaron por los terrenos que rodean al edificio principal, chequeando enormes tanques de agua y luego entraron en el laboratorio, donde pasaron 20 minutos.
En Taji, guardias iraquíes custodiaron la entrada del gran complejo estatal donde se puede ver una gran imagen del presidente Saddam Hussein encima de la verja principal.
El miércoles, los inspectores visitaron tres sitios en las afueras de Bagdad: un taller de maquinarias pesadas administrado por el ejército, una fábrica de grafito y un sitio de misiles. Los expertos dijeron que las autoridades de Bagdad habían cooperado completamente en el primer día de trabajo desde diciembre de 1998.
Las inspecciones se realizan en cumplimiento de la resolución 1441 del Consejo de Seguridad, que le da a Bagdad la última oportunidad de desarmarse. El país árabe niega que posea armas de exterminio masivo.
Estados Unidos ha amenazado con la guerra si Iraq no se desarma.
Bagdad tiene hasta el 8 de diciembre para declarar cualquier arma nuclear, química o biológica en un informe inicial al Consejo de la Seguridad de la ONU.
En la sede de la ONU en Nueva York, el jefe de los inspectores, Hans Blix, dijo que en enero un curso de entrenamiento adicional le daría 300 expertos para la misión en Iraq, con vistas a inspeccionar los 700 puntos potenciales en la lista de la comisión de inspección.