JERUSALÉN.- El conservador Ariel Sharon, favorito en los sondeos sobre las elecciones generales, dijo que invitará al laborista Mitzna, su principal contrincante, a formar una coalición de unidad "para responder a nuestros problemas, que son muchos".
"Creí y sigo creyendo que un gobierno de unidad proporcionará mejores respuestas a los problemas que afrontamos", dijo Sharon ante un foro de la comunidad empresarial en Tel Aviv.
"Por tanto, después de ser elegido en los comicios del 28 de enero, me dirigiré al Partido Laborista con ese fin", agregó.
El Partido Laborista formó parte durante veinte meses del primer Gobierno de unidad formado por Sharon tras su victoria electoral de febrero del 2001, y abandonó la coalición en noviembre pasado por divergencias sobre las partidas presupuestarias para los asentamientos judíos en Cisjordania y la franja de Gaza.
La creación de un Estado palestino para alcanzar la paz, tras más de dos años de una sangrienta "guerra de desgaste" entre ambos pueblos, y la salvación de la economía israelí, en una persistente y grave recesión, están ya en el centro del proceso electoral.
Al recontar hoy martes el 60 por ciento de los votos de los afiliados laboristas, que ayer lunes acudieron a las urnas con el fin de escoger a los integrantes de la lista del Partido para ocupar los 120 escaños de la Cámara Legislativa, el "número" lo ocupa el general en reserva y ex ministro de Ciencia y Cultura Matán Vilnaí.
Los tres primeros escaños serán ocupados por Mitzna, un general en reserva del "campo de la paz", el ex ministro de Asuntos Exteriores Simón Peres, y el ex ministro de Defensa, Benjamín Ben Eliezer, que no tuvieron que someterse a los comicios internos.
El ex ministro de Justicia Iosi Beilin, conocido líder de los "palomas" entre los políticos de la socialdemocracia y activo interlocutor de emisarios del Gobierno de Yasser Arafat, estaba en una posición considerada "irreal" entre los 120 candidatos.
Los sondeos prevén actualmente, a menos de cincuenta días de los comicios nacionales, hasta 37 escaños para Sharon y sus candidatos del Likud al Parlamento, y alrededor de 20 para Mitzna y su Partido Laborista.
Entre los primeros diez de la lista de los candidatos electorales del Likud, quienes se supone se encargarán de importantes carteras ministeriales en el próximo Gobierno, hay al menos cinco que rechazan la creación de un Estado palestino -en contra de la opinión de Sharon- y también abogan por el destierro del Presidente palestino, Yasser Arafat.
Entre esos "duros" de la "primera decena" de los candidatos del Likud están Benjamín Netanyahu, que aspira a seguir ocupando el Ministerio de Asuntos Exteriores; el titular de Asuntos del Medio Ambiente, Tsaji Hanegbi; el de Seguridad Interior, Uzi Landau; la de Educación, Limor Livnat, y el ministro sin cartera Dany Navé.
Los observadores políticos indicaban hoy que Sharon, rodeado de "halcones" de la derecha del Likud, y Mitzna, un ex alcalde pacifista recién llegado a la política a escala nacs casi dos años que lleva en el poder, Sharon, aún apoyado por la mayoría de los israelíes, se convirtió en una "incomprensible paradoja" para los analistas porque su Gobierno de unidad con los laboristas ha sido, tal vez, el peor en la historia del país.
Mitzna, a diferencia de Sharon, no promete "paz y seguridad", sino, simplemente, "otra alternativa", y ya anunció que se unirá con Sharon "si acepta nuestras posiciones", es decir, evacuar la mayoría de los asentamientos judíos y en el plazo de un año sacar al Ejército de Gaza y Cisjordania, donde se levantaría el futuro Estado palestino.