BAGDAD.- Los expertos de la ONU ampliaron hoy su radio de acción al visitar por primera vez cinco lugares en un sólo día, en unas inspecciones para las que Irak dice que sólo precisan ocho meses y ellos afirman que al menos necesitan un año.
Desde la llegada el domingo a Bagdad de un nuevo grupo de inspectores, son ya más de 40 los que se encuentran en Irak, lo que hace posible que aumenten el número de sus visitas a sitios que sospechan pueden ocultar armas de destrucción masiva, prohibidas a los iraquíes desde la Guerra del Golfo Pérsico de 1991.
Los especialistas de la ONU estuvieron por cuarta vez desde que reanudaron sus inspecciones el pasado 27 de noviembre -y por segundo día consecutivo- en la Agencia Nuclear Iraquí, cuyas instalaciones de Toweiza, en el barrio de Salman Pak, están situadas unos 20 kilómetros al sur del centro de Bagdad.
Un equipo de expertos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) regresó hoy a la Agencia, que fue levantada después de que la aviación israelí destruyese en 1981 la central nuclear construida en el ese mismo lugar con ayuda y tecnología francesa.
Sus instalaciones también fueron atacadas por la alianza que encabezó Estados Unidos en la Guerra del Golfo Pérsico de 1991 y bombardeadas por estadounidenses y británicos en la "Operación Zorro del Desierto", en diciembre de 1998.
Otro equipo de la OIEA visitó cerca de la frontera con Siria la antigua planta de Al Qaim, que estuvo destinada a la producción de "sal amarilla", un material utilizado para enriquecer el uranio.
Todos los productos que estaban almacenados en la planta de Al Qaim, incluida una cierta cantidad de uranio, fueron trasladados a las instalaciones de Al Toweiza, donde se encuentran bajo una capa de hormigón y con el sello de la ONU desde hace casi una década.
Por su parte, los expertos de la Comisión de la ONU para la Inspección, Vigilancia y Verificación (UNMOVIC) visitaron tres fábricas de la Comisión Iraquí de Industrias Militares.
La primera fue la de "Ibn Al Heizam", en el norte de Bagdad, otra la de "Abu Ghuraib", que sirve para la producción de vacunas y se encuentra unos 35 kilómetros al oeste de la ciudad, y la tercera la de "Musayab", unos 80 kilómetros al suroeste de la capital.
El director de "Abu Ghuraib", Harith Mohamed Salim, dijo a EFE que los expertos de la ONU le interrogaron y revisaron los cuatro laboratorios de la factoría, dedicados a la elaboración de vacunas para uso veterinario, "y encontraron en su lugar el único sello colocado por sus antecesores, en un aparato de liofilización".
La fábrica, explicó Salim, fue construida en 1995 y, hasta el momento, no ha sido objeto de ataques de los bombarderos estadounidenses y británicos.
Por su parte, en unas declaraciones difundidas hoy por el semanario oficial iraquí "Al Rafidain", el jefe de la Comisión Nacional Iraquí de Coordinación con los inspectores de la ONU, general Husam Mohamed Amin, señala que "si la UNMOVIC y la OIEA cumplen sus promesas, espero que acaben su misión en ocho meses".
La declaración del alto mando militar iraquí contradice lo dicho por el director general de la OIEA, el egipcio Mohamed Baraday, quien, tras visitar Bagdad a fines de noviembre, afirmó que las inspecciones llevarían "al menos un año", en la primera diferencia de puntos de vista sobre el calendario de unas inspecciones que han sido ampliadas y, además, aceleradas en su ritmo.