WASHINGTON.- La Universidad de Stanford (California) anunció su intención de extraer células madre a partir de embriones humanos clonados, lo que la convertiría en la primera institución de altos estudios estadounidense en lanzarse públicamente a la investigación sobre la clonación humana con fines terapéuticos.
Las investigaciones, que comenzarán gracias a una donación privada anónima de 12 millones de dólares, serán dirigidas por el médico Irving Weissman, uno de los mejores especialistas en el dominio de las células madre, indicó este martes la universidad en un comunicado.
Weissman se defendió de la posibilidad de clonar humanos. "Estamos totalmente opuestos a la clonación humana reproductiva", dijo al diario USA Today.
La técnica utilizada, "la transferencia del núcleo de células somáticas", será la misma que la usada para la clonación de la oveja Dolly en 1996.
El principio consiste en tomar una célula adulta y fusionarla con un ovocito al cual previamente se le extrajo el núcleo, que contiene el material genético. Pero en lugar de ser implantado en el útero (clonación reproductiva), el embrión humano, al cual se deja crecer algunos días, luego es destruido para poder extraer las células madre.
Esto permitirá un día "reparar" o remplazar órganos dañados y también curar enfermedades hasta ahora incurables.
Según Weissman, estas experiencias tienen por objetivo encontrar nuevos tratamientos contra el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares o neurodegenerativas (Parkinson).
Se trata de "traducir la investigación fundamental en tratamientos que serán directamente beneficiosas para las (curas de) enfermedades", dijo el oncólogo Philip Pizzo, de la escuela de medicina de Stanford.
Es la primera vez que una universidad estadounidense anuncia públicamente su intención de realizar clonaciones con fines terapéuticos.
Según la prensa estadounidense, un investigador de la Universidad de California-San Francisco habría intentado realizar experiencias similares, pero los resultados de los trabajos nunca fueron publicados.
Un sólo laboratorio privado de Estados Unidos, la firma Advanced Cell Technology (ACT), se lanzó públicamente a la clonación terapéutica. En noviembre de 2001, la firma anunció haber producido embriones humanos clonados para obtener células madre, una primicia mundial que suscitó una intensa polémica.
Hasta la fecha, la extracción de células madre embrionarias fue efectuada a partir de fetos abortados o embriones "supernumerarios", creados in vitro en clínicas de tratamiento contra la esterilidad, y luego congeladas.
En agosto de 2001, el Presidente George W. Bush, invocando motivos religiosos, bloqueó el financiamiento federal de todas las investigaciones que tenían como fin destruir embriones humanos.
El anuncio de la Universidad de Stanford tiene lugar en momentos en que el Estado de California promulgó una ley que autoriza la investigación sobre células madre embrionarias. Es el primer estado estadounidense en autorizar este tipo de investigaciones sin limitaciones.
Esto demuestra también que los investigadores estadounidenses no pretenden quedarse de brazos cruzados ante la indecisión de Washington -un proyecto de ley que prohíbe la clonación humana está en un punto muerto desde hace más de un año en el Senado- y la competencia extranjera.