KURU, Guayana francesa.- El nuevo cohete Ariane 5 de diez toneladas sufrió un problema técnico a los tres minutos de despegar sin problemas del centro espacial de Kuru, en la Guayana francesa, y cayó al mar este miércoles por la noche.
El incidente, del que por el momento se desconocen las causas, constituye un serio revés para el consorcio espacial europeo Ariane, que con esta misión inauguraba sus lanzamientos de cohetes pesados de nueva generación, y podría afectar a su liderazgo en el lanzamiento se satélites comerciales.
El cohete tuvo que suspender su misión al interrumpirse su combustión, informó el director general de Arianespace, Jean-Yves Le Gall.
Le Gall presentó inmediatamente sus excusas a los dos clientes de la lanzadera. El Ariane 5 tenía la misión de poner en órbita dos satélites: El Hot Bird Tm7 del operador europeo Eutelsat, y el Stentor, del Centro Nacional francés de Estudios Espaciales (CNES).
"Nuestro trabajo es difícil y momentos como éste nos lo recuerdan con crueldad. Ya hemos tenido fracasos y tendremos otros", declaró, consternado.
La misión 157, muy esperada, ya tuvo que ser retrasada en una ocasión. Inicialmente programado para el 28 de noviembre, el lanzamiento tuvo que ser aplazado a causa de un incidente técnico que impidió el encendido del motor.
El programa en el que Ariane pensaba basar sus actividades la próxima década --el cohete Ariane 5 de nueva generación capaz de transportar dos o tres cargas útiles-- sufrirá varios meses de retraso, justo cuando la competencia empieza a tomar posiciones para arrancarle cuotas de mercado.
