CARACAS.- La policía lanzó el lunes gases lacrimógenos y perdigones de goma para disuadir un enfrentamiento entre turbas de opositores y partidarios del gobierno que luchaban por el control de una carretera en el decimoquinto día de un paro que busca la salida del Presidente Hugo Chávez del poder.
Los manifestantes opositores atravesaron vehículos y camiones en algunas autopistas y avenidas de la capital venezolana desde las 6 de la mañana (09.00 GMT), en una acción denominada "El Trancazo", que provocó gran congestionamiento y caos.
La protesta opositora atrajo a grupos de simpatizantes de Chávez al sector Prados del Este, donde ambos bandos se desafiaron mutuamente tocando bocinas, ondeando banderas y cantando lemas.
Ante un inminente choque, la Policía Metropolitana usó gases lacrimógenos y disparó perdigones de goma para dispersar a los manifestantes.
"No nos vamos a ir de aquí, la policía de Caracas no viene cuando ocurre un atraco o un robo, sólo viene para tratar de coaccionarnos pero no tenemos miedo", dijo a la agencia AP Ana Reina, maestra jubilada de 58 años.
Gisela Pérez, vendedora de comida ambulante de 42 años, dijo: "si ellos quieren sacar a nuestro presidente así, nos iremos a matar".
Tras ser reprimidos por la policía, los manifestantes no se retiraron sino que se colocaron a los lados de la carretera despejada, intentando repetidas veces tomar nuevamente la vía.
En otro punto de la ciudad, el jefe de operación de la Policía del distrito Libertador, comisario Antonio Pujol, dijo que las manifestaciones están autorizadas por la Constitución pero no el bloquear las carreteras.
"Si ellos quieren pueden desnudarse pero no pueden trancar la vía", declaró en la avenida La Florida, cerca del centro de Caracas, donde también se registraba un bloqueo.
Efectivos policiales allí dispararon perdigones de goma hacia ventanas de algunas casas vecinas para acallar a residentes que golpeaban cacerolas y protestaban a gritos por la represión policial a los manifestantes.
Al menos una ventana estalló por el impacto de los perdigones, según observó un fotógrafo de la AP.
La oposición, fortalecida luego de la multitudinaria manifestación del 14 de diciembre en Caracas, convocó para este lunes a varias concentraciones en los centros comerciales y plazas de todas las ciudades del país.
"Sigue la prioridad de darle una solución a la crisis de ingobernabilidad", dijo el negociador opositor Timoteo Zambrano.
"La movilización en la calle es un elemento central para presionar al presidente Chávez", dijo, expresando que la coalición opositora de la Coordinadora Democrática retornará este lunes a la mesa de negociación para insistir en la búsqueda de una salida electoral a la crisis.
Chávez, quien soporta la paralización por 15 días, reiteró el domingo su negativa a dejar el poder.
"Yo no me voy a ir de aquí por presiones de un grupo de gerentes, de un grupo de golpistas" advirtió desafiante durante su programa dominical radiotelevisado "Aló Presidente".
"...Estoy aquí por la voluntad de la gran mayoría de los venezolanos, y sólo la voluntad de esa mayoría de venezolanos pudiera sacarme", anotó.
Chávez ha desestimado un posible adelanto de las elecciones, tal como exige la oposición, argumentando que la constitución sólo prevé la convocatoria a un referendo revocatorio de mandato al completarse la mitad del período presidencial de seis años.
El Mandatario cumple la mitad de gobierno en agosto del 2003.
El gobierno de Estados Unidos propuso la semana adelantar los comicios electorales en Venezuela para lograr una salida pacífica a la crisis y evitar una confrontación entre las partes.
La OEA preveía reanudar el lunes sesiones para evaluar el caso venezolano y analizar el posible camino para resolver la delicada situación.
