MOSCÚ.- Por lo menos 55 personas murieron y otras 153 resultaron heridas en el ataque suicida del viernes contra la sede de la administración chechena pro rusa en Grozny, afirmó este sábado el ministerio ruso de Situaciones de emergencia.
La mayoría de las víctimas era empleada de la administración y del gobierno checheno pro ruso, según indicó el jefe adjunto de la oficina chechena en Moscú, Vakha Baibatyrov, citado por Interfax.
Según un alto responsable checheno pro ruso, los kamikazes que realizaron el ataque eran tres y no dos como se creía hasta el momento. El atentado lo perpetraron con un camión y un todoterreno militar repletos de explosivos que pasaron tres puestos de control y se llevaron por delante la valla de seguridad del edificio administrativo. Los vehículos explotaron a unos 10 metros de la entrada de la construcción.
"Los terroristas tenían documentos necesarios para su cobertura", señaló el viceministro checheno del Interior, Ajmad Dakaiev. "Dos permisos de paso oficial estaban pegados al parabrisas del camión y del jeep, de la forma habitual que lo utilizan las fuerzas federales", precisó.
El mismo viernes se inició en Grozny la búsqueda de eventuales cómplices, pero casi 24 horas después del atentado no se informó sobre la detención de ningún sospechoso.
Los rebeldes chechenos atacan regularmente a los responsables chechenos pro rusos, a quienes consideran como traidores. El 12 de octubre, un atentado contra una comisaría de policía en Grozny causó 22 muertos.
