BUENOS AIRES.- Un bebé de cuatro meses murió hoy por desnutrición en la localidad tucumana de Simoca y eleva a 18 el número de víctimas del hambre en el último mes y medio en esa empobrecida provincia del norte de Argentina, informaron fuentes oficiales.
El pequeño falleció en el hospital de Simoca -localidad situada a 50 kilómetros al sur de la capital provincial- a causa de un paro cardiorrespiratorio generado por un espasmo bronquial complicado con una desnutrición de tercer grado, indicaron los médicos.
Luis Marcelo Albaca, el clínico que atendió al infante en sus últimas horas, debió salir casa por casa para pedir dinero para un féretro y poder velar y sepultar al infortunado bebé.
"La situación en esta ciudad es dramática, con un nivel de desnutrición y de mortalidad infantil sólo comparable a países de Africa y a regiones de la India, y la Nación no hace nada", denunció.
"El Operativo Rescate (del gobierno) demostró que es ineficiente y demagógico, vino a Simoca e instaló un dispensario a pocas cuadras del hospital, cuando lo que se debe hacer es ingresar a zonas inhóspitas y alejadas, donde la gente no puede ser asistida", reclamó Albaca.
El 20 de noviembre, una semana después de conocerse la muerte por desnutrición de cuatro niños tucumanos, la directora de Políticas Sociales, Hilda González de Duhalde, anunció el lanzamiento del "Operativo Rescate" contra el hambre en Tucumán, que luego se ha extendidos a otras provincias del norte de Argentina.
Un equipo interdisciplinario recorrería casa por casa las zonas más críticas del distrito para detectar los casos de menores y familias desnutridas y darles una solución inmediata.
De acuerdo con un reciente informe oficial, hay 2.000 niños con desnutrición de distinto grado en Simoca, mientras que hasta la semana pasada habían sido censados 11.790 menores desnutridos en la provincia, sobre un total de 18.000 casos.
En el Hospital de Niños de la capital provincial están actualmente internados 40 menores internados con cuadros de desnutrición de distinto grado.
En Argentina más de la mitad de sus 36 millones de habitantes son pobres, casi cuatro millones indigentes, y el 37 por ciento de su población económicamente activa no tiene trabajo o lo hace por menos de 35 horas semanales, en un país considerado el cuarto exportador mundial de alimentos.