JERUSALÉN.- En un esfuerzo por contener las consecuencias del escándalo político que sacude su partido Likud, el Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, amenazó hoy con expulsar de la lista de candidatos al Parlamento a "cualquiera que no pueda explicar su elección de forma satisfactoria".
Sharon se refería a la viceministra de Infraestructuras, Noemí Blumental, quien alego hoy su derecho al silencio, al ser interrogada por la policía sobre la posible compra de votos durante las primarias del pasado 9 de diciembre.
Blumental, que durante dos días había estado escondiéndose de los investigadores y sólo acudió a comisaría tras ser amonestada por el asesor jurídico del Gobierno, se limitó a decir que no hablará por temor a ser incriminada.
La actitud de la viceministra sorprendió en círculos del Likud, y Sharon dijo esta noche que si ésta no colabora la cesará en su cargo y hará lo que esté en su mano por apartarla de la lista al Parlamento.
"Aquel que no dé una explicación completa y satisfactoria sobre cómo fue elegido, no puede ser candidato a diputado por el Likud", dijo el primer ministro en una reunión con dirigentes de su partido, según informó la radio pública.
Según las denuncias de activistas y candidatos, en las primarias del Likud se cometieron todo tipo de trueques ilegales, sobornos y hasta chantajes por los votos de una parte de los 2.900 miembros del Comité Central del partido, que debía elegir a los candidatos.
Entre los investigados está el mismísimo hijo de Sharon, Omrí, uno de los candidatos elegidos.
Precisamente con respecto a "Sharon Jr.", Blumental decía hoy que mejor haría "Sharon (padre) si mirara en su entorno más cerca", antes de criticarla por guardar silencio ante la policía.