MOSCÚ.- Rusia y Corea del Sur acordaron hoy aunar sus esfuerzos para acabar con la escalada de tensión provocada por el anuncio del régimen de Pyongyang de que ha reanudado un programa nuclear que puede ser empleado para crear armas atómicas.
En una reunión celebrada en Moscú, el viceministro de Exteriores surcoreano, Kim Hang-kiung, y su homólogo ruso, Alexándr Losiukov, acordaron "trabajar juntos para reducir la escalada de la crisis y resolver la situación por medio de las negociaciones".
Según Losiukov, en las conversaciones se estudiaron diversas posibilidades de actuación, aunque no especificó estos planes.
Sin embargo, fuentes diplomáticas rusas dijeron a la agencia Interfax que uno de esos planes contempla la concesión de "garantías multilaterales de seguridad" a Corea del Norte a cambio de que Pyongyang dé pasos hacia la negociación con la comunidad internacional.
Corea del Norte afirma que tiene todo el derecho para recurrir a cualquier armamento a su alcance para hacer frente a una eventual "agresión" de Estados Unidos, que la ha incluido en un "eje del mal" junto a Irak e Irán.
EE.UU. ha rechazado el intento de "chantaje" norcoreano y se ha declarado dispuesto a llevar a cabo una guerra en dos frentes, Irak y Corea del Norte, en caso necesario.
El viceministro Kim llamó al diálogo internacional y explicó que la resolución de la actual crisis debe ser una "tarea común" de Estados Unidos, Rusia, China y Japón.
Pero subrayó el papel especial que puede desempeñar Rusia debido a "sus buenas relaciones con Corea del Norte".
Otro viceministro ruso, Viacheslav Trubnikov, señaló a la prensa que Moscú insta a Pyongyang a que respete el Tratado de No Proliferación Nuclear y cumpla "estrictamente con sus compromisos", entre ellos la presencia de inspectores internacionales.
Pyongyang ha expulsado a los técnicos del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) que vigilaban su programa nuclear y ha reanudado el funcionamiento de un reactor donde puede procesarse plutonio.