CARACAS.- La oposición realiza este martes una marcha en Caracas en respaldo a la desobediencia tributaria para presionar la renuncia del presidente Hugo Chávez y la convocatoria inmediata a elecciones.
La crisis política y económica generada por el paro nacional, que cumple 37 días, tiende a complicarse ante la decisión de la oposición de radicalizar sus protestas con el llamado a la suspensión total de las actividades bancarias por 48 horas y el no pago de los impuestos.
El gobierno, por su parte, intensifica las acciones dentro de la empresa estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA) para tratar de restablecer las operaciones de la corporación, que es la principal generadora de ingresos y motor económico del país.
El ministro de Energía y Minas, Rafael Ramírez, anunció que el gobierno realizará en los próximos días una reestructuración en PDVSA que implicará el despido de numerosos gerentes medios y empleados administrativos para tener una "estructura muy sencilla" en la corporación.
El gobierno evalúa la posibilidad de pasar las filiales de gas e investigaciones de PDVSA hacia los ministerios de Energía y Minas y Ciencia y Tecnología.
En PDVSA laboran unas 40.000 personas.
El presidente de PDVSA, Alí Rodríguez, ha suspendido a unos 340 gerentes y supervisores de las principales plantas del país en un intento por debilitar la huelga petrolera que se ha convertido en el principal bastión del paro opositor.
El gobierno asegura que ha retomado el control de las plantas petroleras y ha llevado la producción de Venezuela a unos 800.000 barriles por día.
Los trabajadores declarados en paro sostienen que PDVSA apenas está generando unos 240.000 barriles diarios.
Venezuela, que es el quinto productor de crudos del mundo, producía antes del inicio de la protesta 3 millones de barriles diarios.
"Queremos dejar claramente sentada la desobediencia tributaria", dijo el congresista opositor, Andrés Velásquez, al justificar la protesta, y agregó que los venezolanos no pagarán "ni un bolívar más a un gobierno que ataca al pueblo y nos roba la democracia".
Miles de manifestantes opositores se congregaron en los alrededores de una de las sedes administrativas de PDVSA en el este de Caracas para marchar hasta una de las oficinas del Servicio Nacional Integrado de Administración Tributaria (Seniat).
El superintendente del Seniat, Trino Alcides Díaz, instó este martes a la población a no cumplir la desobediencia tributaria debido a que podrían ser objeto de sanciones.
El presidente de la Federación de Trabajadores Bancarios (Fetrabanca), José Elías Torres, declaró que los dirigentes sindicales de los principales bancos del país se reunirán el miércoles para decretar un paro total de 48 horas para protestar el "saboteo del referendo" por parte del gobierno.
La autoridades electorales aprobaron la realización de un referendo el 2 de febrero para consultar al país sobre la renuncia inmediata y voluntaria de Chávez.
La oposición entregó al Consejo Nacional Electoral (CNE) dos millones de firmas para respaldar la convocatoria al referendo.
El gobierno ha rechazado la consulta aduciendo que la constitución sólo permite la realización de un referendo revocatorio al completarse la mitad del período presidencial de seis años. Chávez completa la mitad de su mandato en agosto de este año.
El mandatario señaló que no aportará recursos para ese referendo hasta que el Tribunal Supremo de Justicia decida si es legal la consulta.