LA PAZ.- Bolivia vive este lunes un clima de tensión pues, entre invocaciones al diálogo, el gobierno concentra tropas en una ruta principal cuya ocupación fue anunciada por los productores de coca del Chapare, liderados por el diputado socialista Evo Morales.
Entre 4.000 y 7.000 efectivos policiales y militares, según estimaciones de los medios, resguardan desde esta madrugada la ruta Cochabamba-Santa Cruz que pretende ser tomada por los cocaleros.
El movimiento de los productores de coca del Chapare, un antiguo centro de comercio de droga, demanda la flexibilización de una ley antinarcóticos y el derecho a plantar la hoja. Al pliego del sindicato cocalero se suma la negativa a que el país se adscriba al ALCA y que exporte gas natural a Estados Unidos a través de un puerto de Chile.
En un definitivo esfuerzo por evitar el conflicto, el presidente boliviano, Gonzalo Sánchez de Lozada, llamó el domingo al diálogo, en un mensaje a la nación difundido por una red de testaba con el envío de fuerzas policiales y militares a la zona de conflicto, por donde fluye la mayoría del comercio nacional, y la que los cocaleros tienen previsto ocupar.
Líder de una fuerza opositora de 35 congresistas, Morales aceptó ir al diálogo con el presidente "siempre que participen delegados de todos los sectores (sindicales) y se mantenga el bloqueo" de carreteras.
Morales, quien en agosto disputó la presidencia con el liberal Sánchez de Lozada, denunció en tanto la incursión de francotiradores en la conflictiva región boliviana, donde desde hace quince años se suceden periódicos enfrentamientos.
"La militarización de la zona y la existencia de mercenarios hace que en esta zona se viva un estado de sitio de facto", deploró Morales.
Según el mandatario, cada día de bloqueo de la carretera que une el este con el oeste del país ocasiona pérdidas al país estimadas en 6 millones de dólares diarios.
En otro frente del conflicto, cerca a diez mil ancianos jubilados manifestarán este lunes en la carretera La paz-Oruro, por donde fluye el comercio desde y hacia los puertos de Chile y Perú.
Con sus fuerzas mermadas, los ancianos se encuentran estacionados en la comarca de Calamarca, a unos 60 Km. de La Paz, y desde este lunes tienen previsto iniciar una huelga de hambre y formar "una alfombra humana" para impedir el paso de vehículos.
Los ancianos habían caminado el viernes y sábado últimos cerca a 40 kilómetros, desde la localidad de Patacamaya, en medio de un inclemente frío andino y fuertes lluvias.
