WASHINGTON.- Aviones de combate de la coalición estadounidense-británica bombardearon el lunes un lanzador de misiles tierra-mar cerca de Basora en el sur de Irak, que según el Pentágono representaba una amenaza a sus naves de guerra en el Golfo.
Según un vocero militar en Bagdad, la acción de los aviones aliados dejó seis civiles iraquíes heridos.
El comando central norteamericano de Tampa, Florida, había anunciado en la tarde que aviones de guerra estadounidenses atacaron un puesto de misiles antibuques en el sur de Irak.
"La coalición disparó al lanzador de misiles anti-navíos porque representaba una amenaza para las fuerzas marítimas de la coalición", indicó el Comando Central en un comunicado.
Los aviones de la coalición utilizaron proyectiles de precisión en el ataque a las 09H10 GMT, cerca de Basora, a unos 480 kilómetros al sureste de Bagdad, indicó el comando.
