BOGOTÁ.- La guerrilla colombiana del ELN anunció hoy que ha excluido al Ejecutivo de Alvaro Uribe de sus gestiones en favor de una solución negociada al conflicto armado interno.
Uribe, sostuvo la organización insurgente, "cerró en la práctica las posibilidades para una salida política al país mediante la participación democrática de las masas, que es la esencia de lo que el ELN busca a través de los diálogos con el Gobierno".
"Por esta razón, nos planteamos ahora conversar con diversos interlocutores en espacios sociales, estatales y gubernamentales diferentes del Ejecutivo", notificó el llamado Comando Central (COCE) del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
El mando guerrillero anunció la decisión en un comunicado hecho público este lunes por la página de los rebeldes en Internet.
"Es inocultable que la política de Uribe es de guerra", dijo el COCE, encabezado por Nicolás Rodríguez Bautista (alias "Gabino"), jefe máximo de esa guerrilla, la segunda del país después de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Según el ELN, Uribe acabó con las condiciones que les permitían a los gobernantes conversar con la insurgencia y ha dado preferencia al diálogo con los paramilitares de ultraderecha.
El grupo rebelde aludió a una iniciativa del Ejecutivo, aprobada el pasado diciembre por el Congreso, que reformó y prorrogó por cuatro años la llamada "Ley de orden público", promulgada en 1997 y que faculta al jefe del Estado a celebrar procesos de paz con las organizaciones insurgentes.
La nueva norma acabó con el estatus político que la antigua ley les reconocía a los grupos guerrilleros, como condición para la apertura del diálogo, y autorizó al Ejecutivo para iniciar contactos con la ultraderecha, además de mantener la misma disposición para la extrema izquierda.
La reforma legal fue aprobada tres semanas después de que la asociación paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) comenzará un cese unilateral e indefinido de hostilidades, que rige desde el uno de diciembre, para facilitar un acercamiento con el Gobierno de Uribe.
Una "comisión exploratoria de paz" fue designada el pasado 23 de diciembre por el gobierno para que entre en contacto con las AUC.
El comité fue conformado con seis personalidades, que actuarán bajo la dirección del alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo.
"Los gobiernos anteriores se negaron a dialogar con los paramilitares por ser delincuentes comprometidos con crímenes de lesa humanidad, y reconocieron para la insurgencia su ’status político’", recordó el ELN.
Pero con los cambios en la política de Estado, Uribe "rompe con el proceso de paz", agregó el grupo rebelde, que en los últimos meses de 2002 mantuvo en La Habana tres "reuniones exploratorias" con delegados del gobierno, sin resultados.
El grupo rebelde sostuvo que seguirá "buscando una salida política al conflicto del país desde su ser insurgente, inspirado en la justicia social, la democracia y el pluralismo político".
Con unos 9.000 rebeldes, la mitad de ellos en milicias urbanas, el ELN promueve desde 1998 una agenda de paz, consensuada con las asociaciones civiles, que incluye una gran convención nacional, la convocatoria de una asamblea constituyente y, finalmente, un proceso de paz con el Estado.