NACIONES UNIDAS.— El secretario general de la ONU, Kofi Annan, dijo el martes que no ve razón alguna para atacar a Irak y que piensa que se puede evitar una guerra si la comunidad internacional mantiene presiones sobre Saddam Hussein y los inspectores de armas realizan su trabajo exhaustivamente.
Pero, añadió, la ONU está haciendo planes para lidiar con un éxodo de refugiados y la potencial crisis humanitaria en caso de una confrontación militar. Expertos de las Naciones Unidas están considerando asimismo la posible organización política y administración de un Irak post conflicto.
Pero el mensaje de Annan a un mundo preocupado por la probabilidad de guerra en Irak fue optimista.
Annan dijo que los inspectores de armas de la ONU estaban "apenas comenzando a trabajar a toda máquina" y que no había bases aún para una acción militar. Asimismo, manifestó implícitamente su rechazo a un ataque por parte de Estados Unidos y Gran Bretaña sin la autorización del Consejo de Seguridad.
La resolución adoptada por el Consejo el 8 de noviembre —la cual dio a Irak una última oportunidad para deshacerse de todas sus armas de exterminio masivo— requiere que los miembros del organismo discutan cualquier nueva violación iraquí.
Annan dijo que si los inspectores informan que Irak no está cooperando o que han encontrado armas, espera que el Consejo "cumpla con su responsabilidad" y adopte una resolución detallando las "graves consecuencias" con las que amenazó el 8 de noviembre si Bagdad no cumplía.
Líderes árabes y algunos líderes europeos están entregando a las autoridades iraquíes el mensaje de que tienen que cumplir con sus obligaciones, y ello significa principalmente entregar la información faltante en la declaración de Irak sobre sus programas de armas nucleares, biológicas y químicas y de misiles de largo alcance, dijo Annan.