MONS, Bélgica.- La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) está preparada para ayudar a la ONU a que Irak elimine las armas de destrucción masiva, manifestó este viernes el secretario general de la Alianza, George Robertson.
En la pasada cumbre de la OTAN, en noviembre en Praga, "los jefes de Estado y de gobierno declararon que están comprometidos a tomar medidas para ayudar y apoyar los esfuerzos de la ONU para garantizar el respeto total e inmediato de Irak" a las decisiones de Naciones Unidas, declaró Robertson.
"El proceso de los inspectores parece que está dando resultados, pero seguimos preparados para ayudar a las Naciones Unidas en lo que están haciendo", añadió, al margen de la toma de posesión del nuevo comandante supremo de las fuerzas aliadas en Europa, el general norteamericano James L. Jones, en Mons (este de Bélgica).
Jones por su parte dijo que no está claro si la OTAN intervendrá militarmente en Irak. "El papel de la OTAN en Irak será decidido por la OTAN", aseguró, y añadió que "se está discutiendo esto. Ya veremos qué pasa en el futuro".
El miércoles, Estados Unidos presentó a la OTAN una serie de propuestas sobre el posible apoyo de la Alianza a una guerra en Irak sin que implique un compromiso militar directo de la Alianza.
Estados Unidos propuso el uso de aviones radares Awacs, apoyo logístico a los países que envíen tropas, asistencia a Turquía en caso de agresión de Irak y una misión de mantenimiento de paz tras el conflicto, el uso de bases militares y la utilización del espacio aéreo de los países aliados, el despligue de baterías de misiles antimisiles Patriot para proteger a Turquía, único país miembro de la OTAN que comparte frontera con Irak.
Jones confía en que "cualquier cosa que hagan la OTAN y las fuerzas norteamericanas, lo hagan con éxito".