CARACAS.- La oposición venezolana se mantendrá en la mesa de negociación y acuerdos que facilita el secretario general de la OEA, César Gaviria, replicaron este sábado sus dirigentes ante el anuncio del Presidente Hugo Chávez del eventual retiro del Gobierno.
"El Gobierno puede tomar la decisión que quiera tomar. Nosotros hemos dicho y lo hemos expresado hoy claramente que nosotros seguimos en la mesa, tenemos la voluntad política necesaria para lograr un acuerdo negociado que nos permita dar una salida electoral a la crisis", puntualizó el dirigente Gimoteo Zambrano, uno de los negociadores opositores.
La mesa de negociación opera desde el pasado 8 de noviembre, sin haber logrado progresos sustanciales, y Gaviria viajó este sábado a Miami (Florida, EE.UU.), de donde retornará el lunes, indicó el canal de noticias Globovisión.
Zambrano reiteró que los adversarios de Chávez confían en que a través de la mesa se puede alcanzar una salida electoral, pacífica y democrática a la crisis de Venezuela, patentizada por el paro opositor que llegó a su jornada número 48.
Zambrano aseveró que tampoco la oposición aceptará que el Gobierno "pretenda imponernos unilateralmente un facilitador o voceros que él pretenda imponernos, eso no lo aceptaremos (...)".
Antes de su viaje a Brasilia, sobre la medianoche del viernes, el Presidente Hugo Chávez afirmó que se está "considerando levantar nuestro equipo de esa mesa de diálogo, porque esa gente que está ahí no da demostraciones ni siquiera de tomar de verdad el carril democrático", en declaraciones telefónicas al canal estatal de televisión.
El Mandatario señaló que se considerará y debatirá este fin de semana.
"Si es que decidimos levantarnos de esa mesa, llamaríamos a dialogar a los dirigentes democráticos de la oposición", precisó Chávez.
El Mandatario venezolano explicó que su Gobierno está estudiando esta posibilidad porque "no hay conversación posible con esos grupos terroristas y fascistas, lo que hay es que derrotarlos aplicando todo el peso de la Ley".
"Representantes de esta mesa estuvieron en Nueva York, dieron allá una conferencia, y tengo la grabación donde dicen estando en la mesa, que como Chávez es un tirano, con los tiranos no se conversa", agregó.
En la mañana del sábado, antes de la partida de Gaviria a Miami, los opositores se reunieron con él y Zambrano declaró que "está muy tranquilo".
Zambrano opinó que a Chávez no le resultará fácil levantar de la mesa a sus representantes: "Está muy activada la comunidad internacional y eso no lo veo fácil que el propio Presidente pueda modificar. (...) Es un problema del Presidente y del Gobierno si ellos lo hacen", dijo.
El dirigente remarcó que la verdadera intención de Chávez es modificar la conformación del Grupo de Amigos de Venezuela (Brasil, Estados Unidos, México, Chile, España y Portugal).
No obstante, en Brasilia el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva rechazó ampliar este Grupo de Países Amigos de Venezuela, que promovió personalmente.
El canciller brasileño, Celso Amorim, dijo que a Chávez le "explicamos que el equilibrio es delicado, importante que también estén representados diversas opiniones porque es la única manera de fomentar el diálogo".
Agregó que la idea de Brasil es iniciar un proceso "que trate de desarmar los espíritus en Venezuela para que los venezolanos encuentren una manera de pasar este momento actual dentro de la Constitución, las normas de la democracia, de una forma pacífica".
Al llegar a Brasilia, el Presidente venezolano anunció que quería que países como Francia, Rusia, Cuba, Trinidad y Tobago o República Dominicana también integrasen el Grupo de Amigos de Venezuela.
