BEIJING/PYONGYANG.- El enviado especial de Naciones Unidas Maurice Strong pidió hoy que Estados Unidos y Corea del Norte inicien un diálogo directo para resolver su enfrentamiento, mientras un representante ruso arribó a Pyongyang para discutir el programa nuclear del país comunista.
"El diálogo es necesario para evitar una escalada del conflicto a causa del programa nuclear norcoreano", dijo Strong, emisario del secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, tras su llegada a Beijing.
"Ambas partes están diciendo cosas muy parecidas a lo que la otra parte exige" pero no se escuchan, señaló el funcionario, que acaba de pasar tres días en Corea del Norte, donde se ha reunido con las autoridades y ha mantenido "intensas conversaciones".
A su llegada a la capital china, Strong insistió en que existe un serio peligro de que la tensión entre Washington y Pyongyang escale a un conflicto armado, pues el problema es "el quiebre de la confianza y la comunicación" entre ambas naciones.
"Ellos (los norcoreanos) están dispuestos a solucionar pacíficamente la crisis, pero también señalan que están decididos a ir a la guerra si consideran que es necesario para su seguridad", dijo Strong. "Existe un serio riesgo de que la crisis escale", añadió.
Según relató, los líderes norcoreanos le dijeron que "no tenían intención de adquirir o fabricar armas nucleares" y que estarían dispuestos a permitir que se volvieran a realizar inspecciones nucleares como parte de un acuerdo diplomático sobre la crisis.
"Ellos mismos creen que están siendo amenazados por el principal poder nuclear del mundo", señaló.
El emisario de la ONU aseguró que visitó Corea de Norte para certificar que la "verdadera crisis" es la situación humanitaria en la que se encuentra el país asiático, cuya población sufre una fuerte hambruna desde hace siete años.
"Los niños, los enfermos, los ancianos no se pueden convertir en víctimas de una crisis política con la no tienen nada que ver", aseguró Strong, quien agregó que los envíos de ayuda internacional se están agotando.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de Naciones Unidas ya se ha visto obligado a reducir las raciones, vitales en la alimentación diaria de millones de personas.
La propia Corea del Norte aseguró que está dispuesta a negociar con Estados Unidos, según informa la agencia estatal de noticias KCNA. Si Estados Unidos "adopta una postura seria sobre la base de fidelidad y confianza", entonces todas las cuestiones pueden ser resueltas satisfactoriamente a través del diálogo, cita la agencia de noticias Xinhua una información de la KCNA.
Corea del Norte insta a Estados Unidos en esta información a acordar un pacto de no agresión y a abandonar formalmente su "política contra Corea del Norte".
La misión de Strong por encargo del secretario general de la ONU se enmarca en toda una serie esfuerzos de mediación que se están llevando a cabo. Una delegación australiana, que en coordinación con Estados Unidos, Japón y Corea del Sur viajó a la capital norcoreana, regresó el sábado a Beijing. Por su parte, el enviado de Estados Unidos, James Kelly, quien ya viajó a Seúl y Beijing, viajará el domingo a Japón, para seguir dialogando sobre el tema.
Otra iniciativa es la del viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Alexander Losiukov, quien hoy llegó a Pyongyang. Allí fue recibido en el aeropuerto por su contraparte norcoreano, Kung Sok Ung, y el embajador ruso en el país.
Previamente, Losiukov pasó por Beijing, donde dijo que la crisis sólo puede resolverse mediante negociaciones. El diplomático tiene previsto reunirse con el Jefe de Estado norcoreano, Kim Jong Il, y presentará a Corea del Norte un "paquete de soluciones", de acuerdo con la agencia rusa Itar-Tass.
La propuesta incluye que la península coreana se mantenga libre de armas atómicas y el mantenimiento de un diálogo bilateral y multilateral que dé garantías a Corea del Norte. También prevé la reanudación de la ayuda humanitaria y económica.