BRASILIA.- El Presidente venezolano, Hugo Chávez, aseguró este lunes que Venezuela es "un país en guerra", cuando se cumplen 50 días de la huelga general opositora y rechazó la convocatoria a elecciones anticipadas, en una entrevista al programa Bom Dia Brasil de la cadena de TV GloboNews.
Después de responder inicialmente no a la pregunta de la periodista Miriam Leitao, rectificó y dijo: "Bueno sí, es un país en guerra. Aquí hay una guerra de los medios de comunicación, una guerra política, aquí hay una guerra económica, una guerra moral. Aquí estamos combatiendo".
Chávez reiteró una vez más su rechazo a adelantar las elecciones como pide la oposición, alegando razones constitucionales, y dijo que la única manera sería a través de un golpe de estado.
También tildó la huelga de "golpe". "Una conspiración, terrorismo, y un plan para derrumbar al gobierno constitucional", dijo el presidente, que el pasado sábado recibió un rechazo de su homólogo brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva de ampliar el Grupo de Amigos de Venezuela, a países como Cuba, Rusia o Francia para mediar en la crisis venezolana.
Al ser preguntado por la periodista si la ayuda a una de las partes en un conflicto interno, como lo había hecho Brasil, era una forma de injerencia, Chávez respondió: "en todos los países del mundo hay conflictos (...) ¿Entonces nadie podría vender nada a nadie -un vaso de agua, un poco de café- porque significaría que está interviniendo en el conflicto de otro país?".
"¿De dónde salió esa tésis? Sólo de la locura o de la oposición venezolana. Antes esa situación de subversión contra el estado y contra el pueblo, pedimos ayuda", dijo Chávez en referencia a la gasolina y la carne que ha vendido Brasil a Venezuela para paliar la escasez ocasionada por la huelga.
Chávez explicó la crisis venezolana y la falta de crecimiento dentro del contexto latinoamericano por encontrarse "en medio del huracán, (con) una crisis histórica".
"Usted me pregunta por el desastre económico de mi gobierno. En Venezuela hubo un desastre económico en el siglo XX", dijo el presidente que subrayó el apoyo recibido de los pobres durante el golpe estado de abril del año pasado, porque "comenzaron a sentir el impacto benéfico que atiende, sobre todo, a los más necesitados".
Chávez explicó que la revolución bolivariana es un "gobierno revolucionario, porque está al frente de un proceso revolucionario, de cambio estructural. Es una revolución pacífica y democrática".
Por último, propuso la creación de una empresa multinacional del petróleo latinoamérica, que se puede llamar ’Petroamérica’.
En esa multinacional participarían la Petrobras brasileña, la venezolana PDVSA, la colombiana Ecopetrol, Petroperú, Petroecuador y Petrotrin (Trinidad y Tobago).
"Una OPEP (Organización de Países Productores de Petróleo) de América Latina", aseguró el presidente venezolano.
Dicha multinacional se crearía mediante "acuerdos de los gobiernos, de las operaciones" y no una empresa, con una fusión, "porque cada una tiene tamaños diferentes, compromisos diferentes".
"Pero se puede hacer un esfuerzo de integración sin llegar a la fusión", precisó.