CARACAS.- El Premio Nobel de la Paz Jimmy Carter dijo hoy martes que propuso al Presidente venezolano, Hugo Chávez, y a sus opositores un acuerdo que prevé una salida institucional a la prolongada y grave crisis política del país. El ex Presidente estadounidense dijo que su propuesta también contempla el levantamiento del "paro cívico" de siete semanas, que exige la renuncia de Chávez y ha debilitado la economía del país petrolero en medio de un clima de violencia. "Mi opinión es que ambas partes ahora quieren alcanzar un acuerdo para poner fin a la crisis", dijo Carter en una conferencia de prensa, tras reunirse con Chávez. La propuesta prevé enmendar la Constitución, elaborada bajo el gobierno de Chávez y refrendada en plebiscito en 1999, para recortar el período presidencial -actualmente de seis años y que debe concluir en agosto del 2007- y permitir adelantar un referendo revocatorio sobre el mandato del Presidente. Si se esa vía se estanca, Carter dijo que la otra alternativa es que ambas partes acuerden la realización del referendo revocatorio, contemplado en la actual Constitución a partir del 19 de agosto, cuando se cumple la mitad del período de Chávez. Para Carter, una enmienda que recorte el mandato presidencial sería una de las salidas más rápidas y factibles, y afirmó que tanto la oposición como Chávez han expresado su respaldo. "Creo que esto es un paso en una dirección positiva, pero no es una respuesta definitiva de ninguna manera", dijo al concluir una visita a Venezuela, la segunda en seis meses. Recortar el mandato de Chávez requiere de un engorroso procedimiento que tomaría meses y que pasa por recoger firmas, tener el apoyo del parlamento y hacer un referendo. Pero Carter cree que con voluntad política sería agilizado. "Si nuestra propuesta de enmienda constitucional es aceptada, entonces el cronograma sería mucho más rápido", dijo. Las propuestas serán presentadas en la primera reunión del "grupo de países amigos" de Venezuela que está prevista a nivel de cancilleres el viernes en Washington, en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA). El grupo fue conformado la semana pasada y está integrado por Brasil, Chile, México, España, Estados Unidos y Portugal. Hasta ahora Chávez, un teniente coronel retirado que hace nueve meses sobrevivió a un alzamiento militar apoyado por grupos civiles, había dicho que la única vía que lo llevaría a dejar el poder es si perdiera en un referendo revocatorio. Rechazaba así la única propuesta de la oposición: un referendo para consultar a los electores si consideran que Chávez debe renunciar de manera inmediata y voluntaria. La propuesta de Carter se produjo a 12 días de la fecha prevista, el 2 de febrero, para un referendo consultivo, no vinculante, promovido por la oposición y al que Chávez se opone. Carter opinó que el proceso será celebrado, "tal vez no exactamente en esa fecha específica, pero en un futuro próximo". Chávez había dicho que no dimitir a si perdiera en esa consulta, de la que pidió su nulidad ante el Tribunal Supremo de Justicia. La decisión se espera para esta semana. Pero tras su reunión con Carter, el martes Chávez dijo a los periodistas en el palacio presidencial de Miraflores que no está cerrado a las opciones constitucionales. "Si el pueblo en elecciones libres (...) decidiera que hay que recortarlo (el período presidencial) a cuatro años, pues yo no tengo ningún problema porque es la voluntad del pueblo venezolano. Ojalá la oposición se ponga a trabajar para tratar de que esa vía sea positiva para ellos", afirmó. Las rígidas posturas de ambas partes han estancado las negociaciones para un acuerdo, que desde hace más de dos meses promueve la OEA, el Centro Carter y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Mientras, las tensiones en la calle han crecido en los últimos días y han cobrado seis vidas desde el inicio del "paro cívico" el 2 de diciembre. El temor de que la crisis derive en un estallido social levantó la preocupación de la comunidad internacional y ha costado caro a Venezuela en materia de riesgo crediticio y en cuanto a la confianza para las inversiones.
