ASUNCION. El Congreso paraguayo inició el jueves un juicio político al Presidente Luis González Macchi bajo cargos de corrupción, incapacidad y terrorismo de estado, con la formalización de las acusaciones ante el Senado por parte de legisladores de la cámara baja.
"Las pruebas que vamos a presentar son contundentes. Hemos tomado cuatro casos que cada uno por sí es motivo suficiente para la destitución del presidente y su posterior enjuiciamiento penal" dijo ante el Senado el diputado opositor Rafael Filizzola, encargado de relatar las acusaciones.
"l proceso que nos convoca es el reflejo de las desgracias de este país, la corrupción e incapacidad del presidente y el fracaso de los demás poderes públicos" agregó.
La lista de acusaciones incluye el desvío de 16 millones de dólares de bancos privados intervenidos por el estado, fraude en un fallido proceso de privatización, uso fraudulento de fondos del presupuesto, y secuestro y torturas de dos militantes de izquierda.
El Senado necesita los votos de 30 de sus 45 miembros para destituirlo.
El presidente dijo el miércoles que aguardaba tranquilo el inicio del trámite y adelantó que el oficialismo contaría con los 16 votos necesarios para impedir la mayoría necesaria para la destitución.
"Este proceso es fundamental para recuperar algo de la credibilidad que hemos dilapidado", añadió Filizzola en su primer alegato ante los senadores. "Venimos a pedir un acto de justicia".
La etapa de acusaciones fue seguida por los defensores del presidente, el ex juez y hermano del mandatario, José González Macchi, y el abogado Osvaldo Bergonzi.
El presidente presentará su alegato de defensa el 29 de enero, el Senado deliberará por tres días, dará lugar a alegatos de réplica del 2 al 6 de febrero, y sentenciará al final de una sesión cuyo desenlace se prevé para el 10.