CARACAS.- Cientos de miles de opositores venezolanos se reunieron el sábado en la principal autopista del este de Caracas en una gigantesca concentración de 24 horas para exigir elecciones anticipadas, en el día 55 del paro cívico contra el Presidente Hugo Chávez.
La manifestación se convocó en rechazo a una reciente decisión de la máxima corte de esta nación petrolera, que a principios de la semana suspendió la convocatoria a un referendo previsto el 2 de febrero para consultar sobre la renuncia voluntaria de Chávez, cuya dimisión es el objetivo principal del paro.
La dirigencia opositora, representada por una Coordinadora Democrática de empresarios, sindicalistas y partidos políticos, anunció durante la manifestación el llamado a un "referendo alternativo" que consistiría en la recogida de firmas hasta el 2 de febrero para pedir una enmienda de la Constitución, con vistas a acelerar la salida del jefe de Estado.
Vestidos con el amarillo, azul y rojo de la bandera del país sudamericano y ondeando pancartas con lemas contra el mandatario, algunos de los manifestantes instalaron tiendas de campaña en la autopista Francisco Fajardo, preparados para pasar la noche protestando contra el gobierno.
"Hasta ahora el gobierno lo que ha hecho es burlarse del pueblo de Venezuela para no darle una salida electoral", dijo Alfredo Ramos, sindicalista opositor y uno de los líderes de la protesta, al canal de noticias Globovisión.
La oposición, que también demanda que las elecciones presidenciales previstas para el 2006 se realicen este año, acusa a Chávez de arruinar la economía con sus políticas revolucionarias de tono izquierdista y de ser un dictador que quiere imponerle al país un gobierno comunista como el cubano.
"Aquí vamos a estar y nos vamos a quedar hasta mañana o hasta que haga falta", dijo Manuel González, un ingeniero de 32 años, mientras ondeaba su bandera a las puertas de su tienda de campaña, instalada en una franja de césped en medio de la usualmente transitada vía.
La demostración, en un ambiente festivo donde la música bailable se mezclaba con los discursos políticos, se realiza en las inmediaciones de una base militar. Tiene previsto culminar a las 11:00 de la mañana del domingo, hora local (15:00 GMT) y pretende ser la más grande que ha hecho hasta ahora la oposición.
Algunos de sus líderes esperaban reunir más de un millón de personas en los cuatro kilómetros de autopista reservados para la protesta.
La concentración ocurre dos días después de una marcha de cientos de miles de chavistas en Caracas con la que el Presidente celebró el 23 de enero, fecha en la que hace 45 años fue derrocado Marcos Pérez Jiménez, el último dictador de la nación.
También se produce en momentos en que la tensión entre los simpatizantes y enemigos de Chávez se mantiene en uno de sus puntos más álgidos desde el inicio de la paralización el 2 de diciembre, con frecuentes choques callejeros que han dejado al menos siete personas muertas y decenas de heridos.
