LA HAYA.- El ex Presidente yugoslavo Slobodan Milosevic regresó el lunes al banquillo de los acusados en el tribunal de crímenes de guerra de La Haya, después de sufrir una gripe que obligó a suspender el juicio durante dos semanas.
Milosevic, de 61 años, lució distraído y bostezó en varias ocasiones mientras el ex ministro croata Petar Kriste testificaba para la fiscalía en el proceso, que comenzó hace casi un año en el Tribunal Penal Internacional de la ONU para la ex Yugoslavia.
El ex hombre fuerte de Serbia está acusado de genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en los Balcanes durante la década de 1990. El histórico juicio ha sido interrumpido en seis ocasiones por problemas de salud de Milosevic.
Milosevic se negó a disputar los cargos en su contra, que datan de los conflictos en Croacia, Bosnia y Kosovo en la década de 1990. Los jueces registraron una declaración de inocencia después de que los reformistas serbios decidieron entregarlo a La Haya en junio de 2001.