MOSCU.- Pyongyang rechazó hoy la solución de la crisis norcoreana en un formato de diálogo "Cinco más cinco", que incluya a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, ambas Coreas, Japón, Australia y la Unión Europea (UE).
La Embajada de Corea del Norte en Moscú difundió hoy, martes, un comunicado por el que oficialmente rehúsa al esquema "Cinco más cinco" para iniciar negociaciones y resolver la crisis provocada por la reanudación por Pyongyang de su programa nuclear.
"Nos manifestamos contra todos los intentos de internacionalizar la cuestión nuclear en la península coreana y por ello comunicamos que no participaremos en unas conversaciones multilaterales, cualquiera que sea su forma", se indica en la nota oficial.
Según el Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores, "el único medio para alcanzar un arreglo pacífico y justo del problema nuclear en la península coreana, es la celebración de conversaciones directas entre Corea del Norte y Estados Unidos. No hay otras opciones".
El formato "Cinco más cinco" para las negociaciones había sido considerado la semana pasada por EE.UU., y Rusia se adhirió en un principio al mismo.
Sin embargo, ayer, lunes, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Igor Ivanov, se acercó de nuevo a la postura inicial norcoreana, contraria a cualquier tipo de mediación, y pidió en nombre del Kremlin unas conversaciones directas entre Washington y Pyongyang.
Según la declaración oficial norcoreana difundida hoy en Moscú, con su apuesta por ese marco multilateral de diálogo, EE.UU. pretende "eludir su responsabilidad en asuntos nucleares e internacionalizar la presión sobre Corea del Norte".
El ministro de Asuntos Exteriores norcoreano afirmó que la actual crisis es "responsabilidad de EE.UU. El propio problema y su solución se han visto complicados por culpa de Washington".
La nota oficial difundida por la Embajada norcoreana en Moscú añadió también que EE.UU. mantiene sus intenciones agresivas sobre Corea del Norte.
"El único foco de amenaza que existe sobre la soberanía y derecho a existir de nuestro país es Estados Unidos, que por sí solo es capaz de eliminar a Corea del Norte", señaló la diplomacia norcoreana.
Corea del Norte ha exigido la firma de un pacto de no agresión bilateral con Washington, que hasta el momento ha descartado tal posibilidad.
Esta crisis se desató en octubre pasado, cuando Washington afirmó que Corea del Norte había reconocido el desarrollo de un programa atómico que podía desviarse para producir armas nucleares.
Bajo presiones norteamericanas, Corea del Sur, la Unión Europea (UE) y Japón interrumpieron el suministro a Corea del Norte del medio millón de toneladas de petróleo anuales incluidas en el conjunto de ayudas energéticas comprometidas en el Acuerdo Marco firmado entre Washington y Pyongyang en 1994.
Ese Acuerdo garantizaba ayuda energética a cambio del fin del programa nuclear independiente norcoreano.
Tras la suspensión del envío de crudo, Corea del Norte comenzó a poner en marcha uno de sus reactores nucleares prohibidos y expulsó a los expertos del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) que trabajaban en ese país.
Después Corea del Norte anunció su retirada del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).
Aparte de su propuesta de conversaciones "Cinco más cinco", EE.UU. ha pedido que el asunto norcoreano sea presentado ante el Consejo de Seguridad de la ONU a fin de que éste respalde la adopción de sanciones para que Corea del Norte abandone su programa nuclear.
El régimen comunista norcoreano ha respondido que la aplicación de nuevas sanciones será considerada como una declaración de guerra y ha amenazado con utilizar todos los recursos a su alcance para repeler una posible agresión norteamericana.
Corea del Norte acusa a Washington de incluirla en el "eje del mal" junto a Irán e Irak y de sabotear el tímido acercamiento alcanzado entre las dos Coreas tras la cumbre intercoreana de Pyongyang, en junio de 2000.
Los norcoreanos también afirman que fue EE.UU. el que primero incumplió el Acuerdo Marco de 1994, pues desde un principio retrasó la construcción en Corea del Norte de dos reactores nucleares de agua ligera incluidos en ese compromiso.