SEÚL.- Corea del Norte prometió hoy responder cualquier acción de Estados Unidos que busque aumentar su presencia militar en la frontera, al tiempo que Washington se mostró más conciliatorio y dijo que se llevarán a cabo conversaciones directas para resolver la crisis nuclear. El secretario de Estado adjunto Richard Armitage, quien habló el martes ante la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, en momentos en que el gobierno del Presidente George W. Bush busca apoyo internacional para una guerra contra Irak, no dio una fecha para dichos diálogos. Mientras la agencia oficial de noticias de Corea del Norte denunció "la histeria de guerra" de Estados Unidos, la estatal Radio Pyongyang dijo que el aislado país comunista busca lograr una solución "pacífica y justa" a la crisis nuclear que estalló hace cuatro meses. El martes, Corea del Norte acusó a Estados Unidos de impulsar una "política del mal", después de que Washington pusiera en alerta a sus aviones y barcos de guerra para un posible desplazamiento cerca del país asiático, envuelto en una crisis por una disputa nuclear. El conflicto nuclear surgió en octubre, cuando Washington dijo que Pyongyang había admitido que reanudó un programa para enriquecer uranio en violación a un acuerdo de 1994, en el que aceptó suspender sus programas de armas nucleares a cambio de dos reactores generadores de energía y combustible gratuito. Desde diciembre, Pyongyang expulsó a los inspectores de armas nucleares de la ONU, abandonó el Tratado de No Proliferación, reactivó un complejo nuclear capaz de producir plutonio para armas, y amenazó con reanudar pruebas de misiles. Armitage dijo que las conversaciones directas se realizarían una vez que Estados Unidos haya llegado a un acuerdo con Corea del Sur, Japón, China, Rusia y la Unión Europea sobre el tema. "Por supuesto vamos a tener conversaciones directas con Corea del Norte. No hay dudas acerca de eso", dijo Armitage el día en que un enviado de Corea del Sur presionó a Washington para que acceda a un diálogo directo con Pyongyang. Los medios de Corea del Norte criticaron el miércoles a Washington por haber puesto en alerta a sus aviones y barcos de guerra cerca del país asiático como posible presencia disuasiva en caso de que Pyongyang quisiera actuar militarmente durante una eventual guerra con Irak. "La histeria de guerra del imperialismo estadounidense que busca aislar a la República Popular Democrática de Corea bajo el pretexto de una crisis nuclear, ha llegado a una fase mucho más imprudente", dijo la agencia KCNA. "Estados Unidos dice que no tiene intenciones de atacarnos y que está buscando una solución pacífica, pero detrás de ese diálogo está preparándose para la guerra", agregó. KCNA dijo que Corea del Norte vigilará las acciones de Washington con un punto de vista apegado a la autodefensa. En Washington, el enviado sudcoreano dijo que el gobierno de Bush debería asumir un papel más activo para buscar el diálogo con Pyongyang e indicó que Seúl no tiene prisa en impulsar un debate en la ONU sobre el programa nuclear norcoreano. Chyung Dai-chul, enviado del Presidente electo sudcoreano, Roh Moo-hyun, dijo a periodistas que había entregado ese mensaje durante conversaciones con el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell. "También expresamos nuestra esperanza de que Estados Unidos (...) asuma un rol más activo para iniciar un diálogo con Corea del Norte, pero también en un contexto internacional, con una posición multilateral", agregó Chyung. El Presidente de Corea del Sur, Kim Dae-jung, hablando con los ministros de Relaciones Exteriores y Seguridad, 20 días antes de dejar el cargo tras cinco años de gobierno, instó a Corea del Norte a solucionar la crisis nuclear ’’por la seguridad de la Península de Corea’’.