BOGOTÁ.- Las autoridades de Bogotá prosiguen hoy la identificación de algunas de las 33 víctimas mortales del atentado que destruyó un club social de la ciudad y miles de personas marcharon por la capital colombiana en protesta por el terrorismo.
Al menos cuatro personas, sin identificar, permanecen aún en los depósitos de cadáveres en el Instituto de Medicina Legal mientras decenas de personas tratan de indagar por la suerte de sus seres queridos.
Agentes antiexplosivos de Estados Unidos analizan hoy, en el interior del destruido estacionamiento del club El Nogal, con unidades del Cuerpo Técnico de Investigaciones de la Fiscalía colombiana y de artificieros policiales qué tipo de sustancia, cantidad y mecanismo de activación causó la deflagración.
Las autoridades dispusieron de algunas líneas telefónicas para las averiguaciones y puestos de reclamación y han solicitado que sean llevadas cartas dentales u otras pruebas médicas para la plena identificación de las víctimas.
Hsta el momento la acción criminal ha sido atribuida por el gobierno del presidente Alvaro Uribe a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), la organización rebelde más antigua y numerosa del país.
El defensor del Pueblo, Eduardo Cifuentes, sin embargo, pidió hoy esclarecer la verdadera responsabilidad del acto criminal para saber sí en realidad fueron los rebeldes y si un eventual proceso de paz con ellos puede conducir a encontrar la reconciliación.
Para el vicepresidente Francisco Santos "no hay dudas" de que fueron las FARC mientras que para otros altos cargos, como el ministro del Interior, Fernando Londoño Hoyos, hay una oscura amalgama de mafias en el atentado.
El fiscal general, Luis Camilo Osorio, ha indicado que, dadas las características de la acción, los responsables tuvieron que tener colaboración de terroristas internacionales de organizaciones extremistas muy reconocidas.
La misma noche del atentado, Uribe pidió a la comunidad internacional que no apoye a rebeldes y criminales de su país y a los países vecinos que no permitan el ingreso ni el funcionamiento de "oficinas" de estas organizaciones.
De los 168 heridos, 56 prosiguen hoy hospitalizados, ocho graves, y algunos en unidades de cuidados intensivos de distintos centros sanitarios de la capital, reveló hoy también el secretario de salud de Bogotá, José Fernando Cardona.
Mientras, cerca de 15.000 personas recorrieron varias avenidas de la ciudad en una jornada de "resistencia civil contra el terrorismo" para protestar por el atentado.
El alcalde bogotano Antanas Mockus encabezó la gigantesca marcha que se concentró en el Parque Simón Bolívar, zona oeste de la ciudad, en el que el cardenal Primado de Colombia y arzobispo de la capital, Pedro Rubiano, celebró una misa.