GAZA.- Al menos cuatro soldados israelíes han resultado muertos y otros tres heridos al hacer explosión un artefacto colocado bajo un tanque Merkava 3 del Ejército israelí al norte de la franja de Gaza, en un acto de sabotaje de HAMAS.
La explosión se registró cerca de la localidad de Beit Lahia, al norte de la franja territorial palestina, y cerca del asentamiento judío de Dogit.
Las Brigadas de Azedin al Kasam, brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica (HAMAS), se ha responsabilizado en un comunicado del ataque, en venganza por la muerte de dos dirigentes de su grupo por disparos del Ejército israelí a principios de esta semana.
El comunicado dice que el Merkava voló por los aires, así como los cuerpos de los cuatro soldados israelíes.
La radio de Israel indicó que los muertos son cuatro o cinco y que el Ejército ha cerrado la zona, a la que han acudido helicópteros y ambulancias para recoger los otros tres soldados heridos en la explosión.
Un experto militar explicó a EFE que los palestinos, que carecen de granadas anti-tanque, han buscado el talón de Aquiles del tanque Merkava 3, uno de los más potentes del mundo, con el mejor blindaje y orgullo de la ingeniería militar de Israel.
Sin embargo, el depósito de pólvora del tanque se encuentra sobre el depósito de combustible que están aparentemente incomunicados.
Los palestinos excavan un hoyo en la tierra en el que introducen una carga explosiva que luego disimulan con una lona, tapada con arena. Al pasar el carro sobre la tela, tras una leve inclinación el Merkava roza el explosivo.
El explosivo no rompe el blindaje del tanque, pero calienta la zona donde se encuentra el combustible y es éste el que en el interior del tanque provoca la deflagración.