EL CAIRO.- El ministro egipcio de Asuntos Exteriores, Ahmer Maher, ha confirmado que existen diferencias entre los Estados árabes respecto a la crisis iraquí.
"Algunos países árabes insisten en la necesidad de adoptar una posición unificada, mientras que otros evitan que se llegue a semejante posición", dijo Majer en una entrevista que publica hoy el diario árabe internacional "Al Hayat".
El ministro señaló que los Estados árabes "alcanzaron un acuerdo para convocar el 1 de marzo una Cumbre sobre la crisis, "pero algunos de ellos intentan postergar la cita con el pretexto de no tener suficiente tiempo" para preparar la reunión.
El canciller egipcio minimizó, no obstante, la importancia de las diferencias, sin precisar su naturaleza, y afirmó que "todos esperan que la crisis se solucione pacíficamente".
"Lo importante no es que los líderes árabes asistan a la reunión con puntos de vista similares, sino que salgan del encuentro con una posición unificada", concluyó.
Durante su reunión del domingo pasado en El Cairo, los jefes de las diplomacias árabes no llegaron a un acuerdo sobre la fecha de la Cumbre extraordinaria que Egipto intentaba convocar para acordar una posición común sobre el acoso que sufre el régimen de Bagdad.
Según fuentes de la Liga Arabe, algunos Estados de la organización, como Siria, insisten en que todos los miembros se comprometan a no prestar ninguna asistencia en un eventual guerra contra Bagdad.
A esa propuesta se oponen un grupo de países encabezados por Kuwait y Arabia Saudí, que son firmes aliados de Washington y tienen en su suelo o embarcados en sus aguas territoriales a más de 150.000 soldados de EEUU preparados para atacar e invadir Irak.
