JERUSALEN.- Soldados israelíes de operaciones en Naplusa mataron hoy sábado a dos palestinos en el casco antiguo, la casbah, se informó esta mañana en esa ciudad cisjordana.
Una de las víctimas es Fahmi Halaue, de 42 años, murió frente a su domicilio por un balazo en la cabeza, informó el gobernador del distrito de Naplusa, Majmud Aloul, quien también indicó que hay varios heridos, algunos de gravedad.
Fuentes militares israelíes dijeron que Halaue llevaba una "gran barra de hierro".
El otro fallecido, Ualid Ajmed al-Masri, de 22 años, perdió la vida por balazos en la cabeza y el pecho que recibió después de arrojar una bomba incendiaria contra los soldados, dijeron las fuentes israelíes.
Desde el sábado anterior -cuando cuatro soldados israelíes perecieron carbonizados en un tanque atacado en Gaza por el brazo armado del Movimiento de la Resistencia Islámica (HAMAS)- 35 palestinos han muerto en operaciones del ejército.
La muerte de los dos residentes de Naplusa sigue a la adhesión de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) a un alto el fuego unilateral, según una iniciativa de Egipto para restablecer el proceso de paz entre los dos pueblos, detenido desde hace más de dos años.
Las tropas israelíes se instalaron el miércoles pasado en la ’’casba’’ de Naplusa, para destruir ’’la infraestructura terrorista’’ y apresar, buscándolos casa por casa, a militantes de la resistencia.
Otro palestino, Ualid Amre, de 35 años, falleció el miércoles pasado a causa de un síncope cardíaco en la cárcel israelí de Nafha, informa hoy el Centro Palestino de Informaciones.
Familiares de Amre, residentes en el pueblo cisjordano de Dura, dijeron que fue víctima de torturas en la cárcel y que las autoridades israelíes le privaron de atención médica, agrega.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP), que anunció ayer viernes su aceptación de una tregua y la ’’desmilitarización’’ de la ’’Intifada’’ contra la ocupación israelí, acusó al Gobierno de Ariel Sharón de ’’torpedear todos los esfuerzos de paz’’.
El Gobierno israelí no respondió aún al anuncio del Gobierno que preside Yasser Arafat y que, de momento, comparte su movimiento Al Fatah. Las otras facciones de la resistencia, entre estas HAMAS y la Yihad Islámica, no se han plegado todavía a esa tregua unilateral.
Los integristas palestinos, que abogan por la continuación de la lucha contra Israel en los territorios ocupados y dentro de este país, condicionan el alto el fuego a que también lo proclame el primer ministro Sharón, cuyas Fuerzas Armadas están empeñadas actualmente en una intensa campaña militar contra HAMAS y la Yihad Islámica.
El primer anuncio del alto el fuego fue formulado en Moscú por el ’’número 2’’ de Arafat, Majmud Abas (Abu Mazen), en vísperas de una nueva reunión, la semana próxima en El Cairo, de representantes de las doce facciones palestinas que participan en el alzamiento.
La tregua por un año responde a una iniciativa egipcia elaborada por el jefe de los Servicios Secretos de ese país, líder de la Liga Arabe, Omar Soleimán, quien la propuso a todas las facciones a fin de restablecer las negociaciones de paz con Israel y por esta vía concretar la futura creación de un Estado palestino independiente.
Según el Centro Palestino de Informaciones, Abu Mazen ha dicho que la participación en la conferencia de la semana próxima en El Cairo será autorizada sólo a los representantes de esas organizaciones que se adhieran por escrito a esa tregua.
Abu Mazen, posible futuro primer ministro del Gobierno palestino, ha sido un crítico de la ’’intifada’’ armada contra Israel pues ha dado pábulo a la represión militar que afecta a toda la sociedad palestina en los territorios ocupados de Cisjordania y Gaza.