SEÚL.- El Gobierno del presidente Roh Moo Hyun pone a prueba la continuación de la política de acercamiento a Corea del Norte con un llamamiento para que suspenda su programa nuclear, tras haber confirmado la reapertura de la central norcoreana de Yongbyon.
Seúl confirmó hoy, viernes, la reactivación de la central nuclear de Yongbyon, con capacidad de cinco megavatios y situada a 90 kilómetros de la capital norcoreana, un día después de que Washington detectara la puesta en marcha del reactor, que permanecía cerrado desde el acuerdo marco de 1994.
Pese a la actual crisis nuclear, el presidente Roh expresó su voluntad de continuar la política de acercamiento con Corea del Norte promovida por su antecesor, el presidente Kim Dae Jung.
Para su nuevo gabinete, Roh nombró ayer a Chung Sae Hyun como ministro de Unificación, que ya lo fue en el anterior gobierno, y designó a Yoon Young Kwan, un catedrático defensor del "deshielo", como titular de Asuntos Exteriores.
En un comunicado, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Suk Dong Yeon, manifestó la profunda preocupación de Seúl por la reapertura del reactor norcoreano, que no sólo pone en peligro la paz y la estabilidad de la península, sino que además va en contra del esfuerzo internacional por frenar la proliferación nuclear.
También instó a Corea del Norte a respetar los acuerdos de seguridad que imponen el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) y el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
El Ministerio surcoreano de Asuntos Exteriores reiteró que el nuevo Gobierno insiste en resolver el conflicto de forma pacífica, tal y como lo expresó el presidente Roh el día de su investidura, el pasado martes, a los representantes de los Gobiernos de EE.UU., Rusia, Japón, China, y la Unión Europea (UE).
En cuanto a si se mantendrá o no el proyecto de construcción en Corea del Norte de dos reactores de agua ligera financiados por Corea del Sur, Japón, EE.UU y la UE, otro funcionario del Ministerio hizo saber que por el momento no se ha tomado ninguna decisión, mientras tanto continuarán las obras del proyecto.
Por su parte, el ministro de Unificación, Chung Sae Hyun, dijo que la reactivación nuclear de Yongbyon y el lanzamiento de un misil al Mar de Japón el pasado lunes por parte de Pyongyang responden a una táctica para presionar a EE.UU. y obtener un diálogo directo con ese país.
En una emisión radiofónica, el ministro explicó que el reciente incidente del misil norcoreano fue recibido con perplejidad por el nuevo Gobierno de Seúl al producirse el mismo día que la investidura del presidente.
Añadió que el Gobierno de Roh no descarta que la reanudación nuclear norcoreana tenga como fin la producción de armas atómicas, por lo que trabajará para impedir tales objetivos mediante la coordinación con EE.UU. y Japón.
A este respecto, un portavoz del Ministerio norcoreano de Asuntos Exteriores insistió hoy en buscar una solución pacífica a la crisis nuclear mediante unas negociaciones directas entre Pyongyang y Washington.
En una entrevista con la Agencia Central de Noticias norcoreana (KCNA), el funcionario de Pyongyang citó el comunicado final que se adoptó en la última reunión del Movimiento de Países No Alineados, en el que esos se mostraron a favor de una solución dialogada entre Corea del Norte y EE.UU.
Corea del Norte volvió a instar a Washington a abrir un diálogo directo para buscar una solución pacífica al problema.
La crisis nuclear, que se inició en octubre pasado cuando EE.UU. denunció que el país comunista había estado desarrollando en secreto un programa nuclear, en violación del acuerdo firmado por ambos países en 1994. La situación se agravó después de que Corea del Norte expulsara a los inspectores del OIEA.
Poco después, Pyongyang amenazó con reactivar sus centrales nucleares y se retiró del TNP después de que Washington suspendió los envíos de petróleo a Corea del Norte.