CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Juan Pablo II enviará a Estados Unidos al cardenal Pio Laghi para que se entreviste con el presidente de ese país, George W. Bush, y le entregue un mensaje con la posición del Vaticano sobre la crisis iraquí, confirmó hoy el portavoz de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls.
El cardenal Laghi, que ha estado en la Nunciatura vaticana en EEUU y ha sido observador en la ONU, partirá en los próximos días con el mensaje para Bush, que consistirá en la explicación de la postura en favor del desarme y la paz defendida por la Santa Sede.
"El cardenal, que será portador de un mensaje (del Pontífice), ilustrará la posición y las iniciativas adoptadas por la Santa Sede para contribuir al desarme y la paz en Oriente Medio", según la declaración de Navarro Valls difundida hoy por el Vaticano.
La decisión de Juan Pablo II es un paso más en las gestiones que el Vaticano ha llevado a cabo en relación con el conflicto iraquí, después de que hace varias semanas enviara al cardenal Roger Etchegaray a Bagdad, donde se entrevistó con el presidente iraquí, Saddam Hussein, al que también entregó un mensaje.
Asimismo, el Papa ha recibido en el Vaticano a dirigentes como el secretario general de la ONU, Kofi Annan, al primer ministro británico, Tony Blair, al presidente del Gobierno español, José María Aznar, y al viceprimer ministro iraquí, Tarek Aziz, así como al ministro de Asuntos Exteriores alemán, Joscka Fischer.
El anuncio del viaje del cardenal Laghi tiene lugar días después de que el portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, manifestara que el Gobierno estadounidense no se dejará influir por la posición del Vaticano.
La Curia vaticana se ha mostrado muy activa en esta crisis, siempre con la tesis de que han de ser los medios pacíficos y diplomáticos los que resuelvan las diferencias entre Irak y la comunidad internacional.
El responsable para las Relaciones con los Estados, arzobispo Jean Louis Tauran, señaló en días pasados que sólo la ONU puede decidir sobre una acción militar contra Irak, ya que una guerra unilateral sería "un crimen contra la paz" y el derecho internacional.