PARIS.- Rusia y Francia dejaron entender implícitamente que podrían utilizar su derecho a veto contra el recurso a la fuerza en Irak, al declararse este miércoles dispuestos a "asumir todas sus responsabilidades en el Consejo de Seguridad", según afirmó el ministro francés de Relaciones Exteriores, Dominique de Villepin, en una rueda de prensa conjunta con sus homólogos ruso y alemán.
"No dejaremos pasar un proyecto de resolución que autorice el recurso a la fuerza", declaró Villepin, al leer una "declaración conjunta" en presencia del canciller ruso, Igor Ivanov, y del ministro alemán de Relaciones Exteriores, Joschka Fischer.
Los tres cancilleres reconocieron, sin embargo que "la inspecciones no pueden continuar indefinidamente. Nuestro objetivo común sigue siendo el desarme efectivo y completo de Irak", agregó Villepin, en vísperas de la reunión crucial del viernes del Consejo de Seguridad en Nueva York.
"Consideramos que se puede alcanzar ese objetivo mediante la vía pacífica de las inspecciones", agregó el ministro francés, quien precisó que su país, así como Rusia y Alemania, "brindan su apoyo" a los inspectores de la ONU.
"Francia tiene la convicción que una guerra sólo lograría incrementar las tensiones. Esto no facilitaría la búsqueda de una solución pacífica en Oriente Medio", agregó.
Ivanov, por su parte, aseguró que "la vía que proponemos es la más racional".
Desde su punto de vista, "existen las posibilidades para una solución política, aunque sólo hay una oportunidad para evitar la guerra".
Fischer declaró que "hay que hacer todo lo posible para lograr una solución pacífica".
Francia, Rusia y Alemania se oponen al recurso a la fuerza contra Irak, como lo piden Estados Unidos y sus aliados europeos, Gran Bretaña y España.
