NUEVA DELHI.-) de India mató hoy en el Estado indio de Assam a tres civiles, atacó una refinería de petróleo, un gasoducto y un cuartel de policía.
El comandante en jefe del ULFA, Paresh Barua, llamó por teléfono a un diario local y reivindicó la autoría del ataque con explosivos y granadas contra la refinería Digboi, esta madrugada, para el grupo separatista y amenazó además con nuevas acciones de este tipo a corto plazo.
Aunque no se registraron víctimas mortales ni heridos, la deflagración produjo un incendio de ingentes proporciones, con llamas de más de 20 metros de altura, las cuales amenazaron además a otros depósitos de crudo cercanos, informó la agencia UNI.
Se trata del atentado más espectacular llevado a cabo por el ULFA desde que inició -en 1979- sus acciones violentas por un estado de Assam independiente, una demanda que ha sido rechazada numerosas veces por Nueva Delhi.
La explosión se produjo en un tanque de petróleo de la reserva petrolera estatal Indian Oil Corporation, cerca de la refinería de Digboi, informó el canal ’’Star News’’. También atacaron un gasoducto cercano al mismo tiempo.
Cientos de personas huyeron de sus casas cuando se desató el fuego en Digboi, a 530 kilómetros de la capital del Estado, Guwahati. El ataque contra el gasoducto afectó a otra empresa estatal, Oil India Limited. Ambos incidentes se produjeron en un área de 15 kilómetros, informó UNI.
En incidentes separados, extremistas de ULFA atacaron además un cuartel de policía y a un grupo de civiles. Los tres civiles muertos eran comerciantes no oriundos de Assam. También se registraron cuatro heridos.
Se estima que alrededor de 50 grupos militantes operan en el noreste de India, en los Estados de Assam, Arunchal Pradesh, Nagaland, Tripura, Mizoram, Manipur y Meghalaya. Sus demandas suelen ser de independecia, aunque algunas veces se trata de simple extorsión. Muchos de estos grupos incluso dirigen gobiernos paralelos en áreas remotas, donde hay pocas posibilidades de que intervenga el gobierno.
Al igual que ULFA, la mayoría de estos grupos comenzó con demandas de independencia. A lo largo de las décadas, muchos cambiaron de perfil, participando algunos en la política, rindiéndose o quedando reducidos a bandas criminales.