EL CAIRO.- La Liga Árabe enviará a Irak una delegación ministerial dentro de la ofensiva diplomática para impedir la guerra, con los ojos puestos en el ultimátum de Estados Unidos para que Bagdad se desarme antes del 17 de marzo.
La misión de la "última oportunidad", como ha sido calificada por los observadores, está compuesta por los ministros de Exteriores de Egipto, Siria, Túnez, el Líbano y Bahrein, y presidida por el secretario general de la Liga, Amro Musa, y viajará a Irak esta semana, probablemente el miércoles, según fuentes del organismo árabe.
El mensaje conjunto será que Bagdad debe "acelerar la aplicación total de la resolución 1441 de las Naciones Unidas" sobre su desarme para evitar una guerra de consecuencias catastróficas para toda la zona, declaró el titular egipcio de Exteriores, Ahmed Maher.
El viaje de la misión árabe a Bagdad fue posible después de que Amro Musa recibiera un mensaje del ministro iraquí de Exteriores, Nayi Sabri, en el que expresaba la disposición de Irak a recibir a la delegación ministerial.
Según algunos medios árabes, Irak se oponía a recibir a dicha delegación por temor a que entre sus propuestas se incluyese el exilio de Saddam Hussein como medio para salir de la crisis, algo que Bagdad rechaza categóricamente.
La visita se produce en un momento en el que el mundo árabe intensifica sus llamamientos para que el líder iraquí haga lo posible por impedir la guerra, ante los intentos de Washington y Londres de conseguir que la comunidad internacional apoye un ultimátum a Irak para que se desarme.
"El tiempo se acaba e Irak tiene que hacer todo esfuerzo posible para eludir una tercera guerra y una próxima catástrofe para la zona", dijo el rey de Bahrein, Hamad ben Isa el Jalifa, presidente de turno de la Liga Árabe, tras advertir que "las oportunidades para una solución pacífica se han reducido".
La delegación, creada por la última cumbre de la Liga Árabe celebrada el primero de marzo en Egipto, concluyó el domingo una visita en Nueva York, donde apeló a Estados Unidos a dar más tiempo a los esfuerzos diplomáticos, y pidió para ello el apoyo de varios miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
"Subrayamos ante el secretario de Estado, Colin Powell, la necesidad de dar una oportunidad a la diplomacia y no correr hacia la guerra como una opción inevitable", dijo Amro Musa, que fue recibido también en Nueva York por el director de la Agencia Internacional para la Energía Atómica (AIEA), Mohammed el Baradei.
El Baradei pide más colaboración de Irak
La misión de la Liga transmitirá a Bagdad un nuevo mensaje, en este caso de El Baradei, de que para evitar la guerra tiene que adoptar "medidas drásticas" y hacer mucho más efectiva su cooperación con los inspectores de desarme de la ONU.
"En este momento es necesario que el Presidente iraquí Saddam Hussein adopte medidas drásticas, incluida su aparición en la televisión para declarar que cooperarán totalmente, él y todos los responsables iraquíes, con los expertos de desarme", dijo el director de la AIEA en unas declaraciones publicadas este lunes por la prensa árabe.
Precisó que Hussein "tiene que anunciar que los iraquíes están dispuestos a permitir que los inspectores se entrevisten libremente con los científicos dentro y fuera de Irak, y a entregar cualquier documento que pruebe la eliminación de las armas de destrucción masiva".