ANCHORAGE, EE.UU.- El invierno no ha sido benigno en Alaska. El jueves hubo una temperatura promedio de 14 grados bajo cero y vientos con ráfagas de 175 kilómetros por hora que hirieron de gravedad a dos personas y causaron grandes daños en la región sur-central del estado más gélido del país.
Dos residentes de la localidad de Two Mat-Su fueron hospitalizados en grave estado, dijo el jefe de policía de Palmer George Boatright. Uno fue alcanzado en la cabeza por un cartel que se desprendió de una estación de servicio, y el otro al derrumbarse un establo.
Las operaciones en el aeropuerto internacional Ted Stevens de Anchorage fueron paralizadas durante nueve horas entre la noche del miércoles y la madrugada del jueves, luego que los fuertes vientos obligaron a evacuar la torre de control.
En el cercano Lago Hood, más de dos docenas de aviones fueron volcados o desplazados por los vientos.
Un incendio alimentado por el viento obligó a clausurar la autopista Glenn durante varias horas, y el servicio eléctrico fue interrumpido durante varias horas en la zona de Anchorage y Mat-Su, afectando a millares de residentes.