WASHINGTON.- El Presidente de EEUU, George W. Bush, emplazó hoy al líder iraquí, Sadam Husein, y a sus hijos para que abandonen Irak en un plazo de 48 horas o afronten una guerra que ponga fin a su régimen.
"Sadam Husein y sus hijos deben abandonar Irak en 48 horas. El no hacerlo acarreará un conflicto militar", afirmó Bush esta noche en un discurso televisado al país.
En su discurso, de 15 minutos, Bush justificó la necesidad de actuar en Irak para conseguir el desarme del régimen de Sadam Husein, y aseguró que EE.UU. "tiene la autoridad soberana para garantizar su seguridad".
El Presidente indicó que "es demasiado tarde" para que Sadam Huseín siga en el poder y aseguró que "el Consejo de Seguridad de la ONU no ha estado a la altura de sus responsabilidades, pero nosotros estaremos a la altura de las nuestras".
El Presidente, Comandante en Jefe de los 250.000 efectivos norteamericanos concentrados en la frontera de Irak, pronunció su esperado discurso al país a las 21 horas (hora chilena).
Advertencias directas
La primera parte de su discurso estuvo dedicada a enunciar los cargos contra el régimen de Saddam Hussein. Luego expuso la situación creada en el seno de las Naciones Unidas y, en particular, del Consejo de Seguridad.
Advirtió que Saddam debe dejar su país en 48 horas y llamó al resto del mundo a retirar a sus enviados y periodistas de territorio iraquí.
Al mismo tiempo, Bush llamó a las fuerzas iraquíes a no combatir y a no incendiar las instalaciones petroleras.
"No es tarde para el Ejército iraquí... No luchen por un régimen moribundo que no vale sus propias vidas", dijo Bush en su alocución televisada.
"En cualquier conflicto su destino depende de sus acciones", indicó y agregó: "No destruyan los pozos petroleros".
Asimismo, pidió a los soldados iraquíes que no obedezcan las órdenes de usar armas de destrucción masiva.
Previsión de represalias
El Presidente Bush advirtió que la guerra podría provocar ataques de represalia a intereses norteamericanos en el país y el extranjero, y dijo que ordenó mayores medidas de seguridad en los aeropuertos y los ríos.
"Estos ataques no son inevitables. Sin embargo, son posibles", dijo Bush. "No nos dejaremos intimidar por matones y asesinos".
Por primera vez desde que llamó la atención sobre Irak en noviembre del año pasado, Bush se refirió a los interrogantes más frecuentes de los norteamericanos: porqué la guerra y porqué ahora.
Dijo que Saddam posee armas de destrucción masiva que podría entregar a un grupo terrorista, que odia a Estados Unidos y es una fuerza desestabilizadora en el Medio Oriente.
"Estados Unidos no ha hecho nada para merecer o invitar esta amenaza, pero haremos todo lo posible para derrotarla. En lugar de ir a la deriva hacia la tragedia, pondremos rumbo a la seguridad", dijo en su mensaje desde la Casa Blanca.
"El tirano desaparecerá pronto", aseguró.