PARIS.- El primer ministro francés, Jean-Pierre Raffarin, reunirá hoy a los miembros de su Gobierno a raíz del inicio de los ataques de Estados Unidos contra Irak.
La reunión extraordinaria, que está prevista para las 12.30 locales (11.30 GMT), tiene como objetivo analizar la situación tras el comienzo de la guerra y analizar las medidas, especialmente de seguridad, a tomar en Francia, indicaron fuentes gubernamentales.
En la primera reacción de París al lanzamiento de las hostilidades, el Ministerio de Exteriores expresó la "profunda preocupación" de Francia y el deseo de que la guerra "pueda cesar lo más rápidamente posible".
También abogó por que "todo sea hecho para evitar sufrimientos adicionales a la población civil" y llamó a "los países de la región a abstenerse de toda iniciativa que agravase la situación".
El Presidente francés, Jacques Chirac, que el martes se alzó contra el ultimátum de EE.UU. a Irak y denunció el carácter unilateral e injustificado de una guerra, se expresará en el curso de la mañana, según el Elíseo.
El líder de la Asamblea Nacional (cámara de los diputados), Jean-Louis Debré, suspendió hoy temporalmente la sesión de la institución para mostrar "la desaprobación" y "gran inquietud" de los legisladores frente a una guerra "ilegítima y peligrosa".
El ministro de Transportes, Gilles de Robien, que estaba en la Asamblea, señaló que la guerra recién iniciada es "contraria a las reglas internacionales", recordó que Francia hizo "todo lo posible" para evitarla y expresó la "tristeza" del Gobierno de que "sean las armas" las que se escuchen hoy.
Un coro de condenas y de preocupación por parte de dirigentes de partidos políticos acogió el comienzo de los ataques de EE.UU. a Irak.
Es "una guerra de conquista", que rompe "violentamente" con 50 años de construcción del derecho internacional y del sistema de la ONU, dijo la secretaria general del Partido Comunista Francés (PCF), Marie-George Buffet, quien llamó a "resistir" y "seguir haciendo todo lo posible para detener el horror".
El PCF y partidos de ultraizquierda han convocado una protesta esta tarde ante la embajada de EE.UU. en París, donde se reforzaron hoy considerablemente las medidas de seguridad.
Francois Hollande, líder del Partido Socialista, también en la oposición, condenó la intervención armada "unilateral" de EE.UU., que "constituye un precedente muy grave".
Para el líder de la centroliberal UDF, Francois Bayrou, la intervención de EEUU "inaugura un siglo" que va a tener un rostro "inquietante" y muestra que la ONU "está ahora en la cuneta".
El portavoz del partido conservador en el poder UMP, Francois Baroin, abogó por que el Consejo de Seguridad de la ONU pueda conseguir "el arreglo más rápido posible, que ahorre (sufrimientos) a las poblaciones civiles y defina un proceso de paz adaptado".