BASE MACDILL, Florida.- Al cumplirse seis días del inicio del conflicto bélico en Irak, el Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aseguró que "se acerca el día del fin del régimen iraquí", aunque negó saber cuánto más se prolongará la guerra.
"Hemos avanzado mucho en seis días", dijo el Mandatario destacando el progreso de la Operación Libertad Iraquí, pero reconoció que aún falta.
Bush, al realizar un repaso del avance de la coalición británico-estadounidense en tierra iraquí, sostuvo que "día a día el pueblo iraquí se acerca a su libertad", una libertad que -continuó- "es un regalo de Dios a la humanidad".
Declaró que la única ambición de su país es la liberación de Irak. "No buscamos otra recompensa (...) y no aceptamos otro resultado que no sea el éxito final", sostuvo en medio de una multitud de soldados que lo vitoreaban y aplaudían a cada segundo, demostrando el buen ánimo y la confianza de las fuerzas armadas estadounidenses.
El Jefe de Estado dijo que defenderá al pueblo iraquí porque ellos no son los culpables de tener al Presidente Saddam Hussein como líder. "24 millones de iraquíes merecen ser libres". Así mismo, destacó que sus tropas están brindando un trato humanitario a los prisioneros de guerra.
Bush tuvo palabras de elogio para sus fuerzas como para las tropas de los países que acompañan a Estados Unidos en este conflicto. "Es un honor tenerlos de nuestro lado", dijo al referirse a los soldados británicos y australianos. También agradeció el apoyo logístico y de ayuda humanitaria de países como España, Polonia, Bulgaria, República Checa y Rumanía.
El Mandatario, que habló desde la base aérea Macdill del Comando Central en Florida, dijo emocionado que "tengo el honor de ser el comandante en jefe de las fuerzas armadas de Estados Unidos".
Agradeció el sacrificio y la valentía de los soldados en la intervención bélica en Irak. "Nuestras fuerzas armadas están demostrando el coraje".
