Kuwait.- Con el objetivo de anular las simpatías hacia Saddam Hussein, tropas británicas han destruido estatuas del presidente iraquí y han entregado agua y alimentos en Basora, según fuentes militares aliadas.
El abastecimiento de agua en la segunda ciudad iraquí, de 1,5 millones de habitantes, quedó interrumpido tras los bombardeos aliados, pero trabajadores de la Cruz Roja repararon las instalaciones, que ahora trabajan a un 40 por ciento de su capacidad, informó el coronel británico Chris Vernon.
Las fuerzas aliadas que operan en las afueras de Basora también destruyeron el cuartel local y de la cercana localidad de Az Zubazyr del partido Baath, e interrogaron a un alto funcionario de la agrupación de Saddam Hussein.
Mientras tanto, prosiguen los combates contra cerca de 1.000 combatientes irregulares que disparan desde ventanas y puertas abiertas, aunque la resistencia se erosiona gradualmente, dijo Vernon.
Las fuerzas aliadas no tienen una idea precisa sobre la fuerza de las tropas iraquíes y el equipamiento militar con el que cuentan dentro de la ciudad, admitió, aunque aclaró que los aliados no se han fijado una fecha para tomar Basora.
Al mismo tiempo, Vernon desmintió las versiones que hablaban de cinco soldados británicos desaparecidos, pero confirmó un incidente de "fuego amigo". Sin embargo, se negó a dar detalles antes de que las familias de los involucrados sean informadas.
En sus esfuerzos por cortar las comunicaciones del régimen iraquí con Basora, las fuerzas aliadas podrían bombardear las instalaciones telefónicas de la ciudad.
A los civiles se les permite abandonar la ciudad, pero todos los hombres son examinados exhaustivamente y considerados como potenciales combatientes, agregó. Según informes de prensa, a los hombres no se les permite volver a Basora una vez que abandonaron el lugar.