NUEVA YORK.- Los neoyorquinos comenzaron a respirar un poco mejor en bares y restaurantes pese a las quejas de los fumadores, cuando entró en vigor el domingo la nueva y estricta ley en contra del tabaquismo en la "Gran Manzana".
Los fumadores neoyorquinos tuvieron que resignarse a soportar el frío del comienzo de la primavera fuera de los bares y restaurantes para poder disfrutar de un cigarrillo, porque ahora está prohibido fumar dentro de estos establecimientos.
"Esta es simplemente otra cosa que ya no se puede hacer", dijo Thaddeus Kromelis, mientres encendía un cigarrillo fuera de un bar en Times Square.
La prohibición, dirigida a proteger a los trabajadores de los 13.000 bares y restaurantes de la ciudad que han permitido fumar dentro de sus instalaciones, fue impulsada por el alcalde de Nueva York, Michael Bloomerg, quien es un ex fumador.
La ley prohibe fumar en bares y restaurantes, con muy pocas excepciones, y las multas son fuertes. La multa para quien infringa la ley por primera vez comienza en 200 dólares, y los negocios que incumplan la ley repetidamente corren el riesgo de ser cerrados.
Algunos dueños de bares y restaurantes temen que la prohibición vaya a ahuyentar a los clientes que no fuman los visiten ahora que el aire que respirarán dentro de estos lugares será más puro.
La prohibición en realidad no estaba pasando la prueba de fuego el domingo. Los bares no estaban tan concurridos y, aunque en algunos negocios podían verse algunos clientes fumando, los inspectores del Departamento de Salud de la ciudad empezarán a entregar citaciones y a imponer multas a partir del 1 de mayo.
Hay que esperar a ver, dijo un cantinero del West Side de Manhattan que pidió no ser identificado. "Espere al primer viernes por la noche", dijo. "Los clientes que no puedan fumar van a ser peores que los borrachos".
Fumar está prohibido en los restaurantes de Nueva York con capacidad para más de 35 personas desde 1995. Los restaurantes más pequeños, las áreas separadas para el bar y los bares han estado exentos, pero esas excepciones se vencieron cuando la nueva ley entró el vigor el domingo.
En California existen leyes estrictas similares contra el tabaquismo, mientras que en centenares de ciudades más pequeñas de Estados Unidos han prohibido el fumar en restaurantes.