CERCA DE NAJAF.- Los primeros combates directos entre las tropas estadounidenses y la guardia republicana iraquí proseguían el lunes cerca de Kerbala, mientras continuaba la ofensiva en Basora y las principales ciudades del sur.
Los combates comenzaron la noche del domingo al este de Kerbala (100 km. al sur de Bagdad) entre las fuerzas de la 3ª división de infantería norteamericana (3ID) y unidades de la guardia republicana iraquí, indicó el coronel Will Grimsley, comandante de la primera brigada de la división.
"Es el primer contacto serio" directo con la guardia republicana, declaró a la AFP este oficial en Najaf, a pocas decenas de kilómetros al sur de Kerbala.
Otros oficiales norteamericanos en la zona señalaron que 200 combatientes iraquíes fueron muertos, heridos o cayeron prisioneros en los enfrentamientos.
Paralelamente a estos combates, los aparatos norteamericanos y británicos continuaban bombardeando el lunes los suburbios de Bagdad, donde supuestamente se encuentran acantonadas las fuerzas de élite de la Guardia republicana.
Ya se habían registrado escaramuzas entre elementos de la guardia republicana y los efectivos de la 3ID -división blindada integrada por 20.000 hombres- que se encuentran entre Najaf y Kerbala.
Por otro lado, veinte personas, entre ellas once niños, murieron al ser bombardeada el sábado por la noche una granja cerca de Bagdad, indicaron el lunes a la AFP familiares de víctimas.
Otras diez personas resultaron heridas en el bombardeo, según las fuentes, dos personas que sobrevivieron al bombardeo, que destruyó tres viviendas en Al Janabiine, periferia de Bagdad.
Once niños, siete mujeres y dos hombres pertenecientes a cinco familias murieron en el bombardeo.
Las dos personas son los únicos supervivientes que pudieron salir indemnes de las tres casas destruidas, que el periodista-fotógrafo de la AFP descubrió el lunes.
La televisión iraquí reanudó sus programas el lunes al mediodía tras una interrupción de diez horas provocada por un bombardeo que afectó el ministerio de Información en Bagdad, uno de los blancos principales de los bombardeos anglo-norteamericanos de las últimas noches.
El moderno edificio de once pisos del ministerio de la Información, situado en el oeste de la capital, fue de nuevo alcanzado por un misil la noche del domingo. Impactos son visibles en la fachada.
Más al sur proseguían los enfrentamientos entre las fuerzas de la coalición y los iraquíes.
El comando central norteamericano (Centcom) en Qatar afirmó el lunes que 100 soldados iraquíes fueron muertos y 50 cayeron prisioneros durante operaciones efectuadas el domingo en el sur del país.
Las operaciones, que se desarrollaron en la región de Najaf y Samawa, respectivamente a 160 km y 300 km al sur de Bagdad, fueron llevadas a cabo por soldados de la 3ª división de infantería y de la 82ª división aerotransportada del ejército, precisó el Centcom en un comunicado.
Asimismo varios cientos de infantes de marina británicos combatían el lunes por la mañana cerca de Basora, según oficiales británicos, para los cuales esta ofensiva que comenzó la víspera es el inicio de la "verdadera" batalla por el control de esta ciudad.
El domingo, unos 600 hombres del 40 comando de los Royal Marines lanzaron un asalto para tomar Abu al Jassib, localidad situada a una decena de kilómetros al sureste de Basora, indicaron los oficiales a un periodista "incorporado" al ejército británico.
Este asalto de los comandos constituye el primer verdadero ataque de infantería en la batalla por el control de Basora, la gran ciudad del sur de Irak situada a 500 km al sureste de Bagdad, que resiste a la coalición desde hace más de una semana.
Hasta ahora, las incursiones de los atacantes en la ciudad habían sido efectuadas por unidades motorizadas y blindados.
El general de brigada Jim Dutton indicó que el objetivo de esta operación era presionar a los opositores al régimen de Saddam Hussein a que se subleven, mostrándole que las fuerzas de la coalición tenían realmente la intención de apoderarse de la ciudad.
De Basora, el corresponsal de la cadena de televisión Al Jazeera, indicó que aviones de la coalición sobrevolaban la ciudad y sus alrededores en la mañana, y dijo haber escuchado numerosas detonaciones, sobre todo provenientes de Abu Al Jassib. La visibilidad era muy mala, debido a un viento cargado de polvo, dijo.
El asalto de los comandos fue lanzado el domingo en la madrugada, primero por tres compañías de unos 120 hombres cada una, con el objetivo de acorralar a los iraquíes contra el Chatt el Arab, a unos kilómetros al norte.
A pesar de la "buena acogida" de los habitantes de Abú al Jasib, según dijo un oficial británico, el terreno seguían siendo peligroso con franco-tiradores emboscados para hostigar el avance británico.
Las tropas de infantería están apoyadas por tanques Challenger II, vehículos de reconocimiento blindados y helicópteros de ataque.
Pero a pesar de los medios empleados, esto no ha impedido la respuesta de los iraquíes. Varios soldados británicos han resultado heridos, algunos de gravedad, indicó sin precisar el número de bajas.