DOHA.- Las fuerzas anglo-estadounidenses incrementan la presión sobre las ciudades clave de Irak para garantizarse la seguridad de la retaguardia en la ruta hacia Bagdad, que, sin embargo, aún está lejos.
El Séptimo Regimiento de Caballería acorazada, que constituye la vanguardia de la Tercera División de Infantería Mecanizada de Estados Unidos, libra intensos combates con la División Medina Bagdad integradas en total por unos 50.000 soldados, a los que se ha encomendado la misión de resistir a toda costa y causar el mayor número de bajas y daños a las fuerzas aliadas.
Según los datos de que disponen los servicios de información militar, unidades adicionales de la Guardia Republicana podrían estar desplazándose desde el norte de Kerbala hacia Bagdad, en un movimiento de repliegue táctico.
Pese a que la aviación aliada machaca sistemáticamente las posiciones de la Guardia Republicana, lo que según fuentes estadounidenses ha mermado su potencial de manera muy notable, prosiguen los enfrentamientos en los que se están empleando carros de combate, artillería pesada, helicópteros artillados y apoyo aéreo.
Asimismo, continúan los combates en torno a las ciudades de Nasiriya y Samawa, en las riberas oriental y occidental del río Eufrates y vitales para controlar las rutas que unen Bagdad con el sur de Irak.
También se han producido fuertes combates en las cercanías de la histórica ciudad de Babilonia, situada a unos 20 kilómetros al sur de Kerbala.
En Nasiriya, un total de 12.000 "marines" combaten casa por casa para neutralizar la férrea resistencia de las fuerzas iraquíes, compuestas en su mayoría por unidades de la Guardia Republicana y de los grupos paramilitares conocidos como "Fedayin de Sadam", reclutados de entre las milicias del partido Baaz.
Los "marines" buscan intensamente en las inmediaciones de Nasiriya y en la vecina ciudad de Shafra al general Alí Hasán Al Mayid, comandante de la Región militar Meridional de Irak y notorio por haber ordenado el empleo de gases tóxicos contra los kurdos en 1988.
Las fuerzas de la 101 División Aerotransportada norteamericana intentan hacerse con la ciudad de Nayaf (a unos 160 kilómetros al suroeste de Bagdad), y se han hecho con un aeródromo a las afueras de la localidad.
La Primera Fuerza Expedicionaria de Marines contará en las próximas horas con una pista de aterrizaje al sur de Bagdad, lo que facilitará el aprovisionamiento de las fuerzas aliadas que avanzan hacia la capital, informaron hoy a la agencia EFE fuentes militares estadounidenses.
Entretanto, las fuerzas británicas siguen intentando hacerse con la ciudad meridional de Basora -la segunda más importante de Irak, con un millón y medio de habitantes-, donde desde el mismo comienzo de la "Operación Libertad para Irak", el pasado 20 de marzo, se producen continuos altibajos en la evolución de los combates.
Fuerzas de la Séptima Brigada Mecanizada (conocida como los "Ratas del desierto") y de los "Royal Marines" mantienen completamente cercada Basora, donde únicamente han podido infiltrarse en algunas calles de la periferia.
En Basora los "Fedayin de Sadam" están presentando una resistencia feroz a las tropas británicas, que han tenido que recurrir a los Comandos de los "Royal Marines", especializados en la lucha antiterrorista y contraguerrilla.
Las fuerzas británicas aplican en Basora las mismas tácticas que aplicaron durante los años de la violencia en Irlanda del Norte.
Por otra parte, el mando aliado informó de que prosigue la investigación sobre la muerte ayer, lunes, de siete mujeres y niños iraquíes en un puesto de control cerca de Nayaf, cuando los soldados norteamericanos abrieron fuego contra un furgón cargado de civiles que, según su versión, no se detuvo a la orden de alto.
