KUWAIT.- La ONU inspecciona las condiciones de seguridad que existen para el abastecimiento en el puerto meridional iraquí de Um Qasar, a donde llegará también en los próximos días la ayuda humanitaria transportada por el Ejército español.
El citado puerto, única entrada por mar a Irak, es una de las áreas meridionales que están bajo control del ejército británico, aunque en los últimos días unidades de helicópteros anglo-norteamericanos han tenido que atacar diferentes posiciones.
Hasta esta conflictiva región tiene previsto viajar mañana un equipo de la ONU integrado por miembros de UNICEF y el Programa Mundial de Alimentos con el objetivo de comprobar si ya es posible comenzar con los trabajos de reparto de la ayuda.
Una fuente de Naciones Unidas explicó hoy a EFE en Kuwait que el martes se hizo una primera inspección y que la impresión "fue positiva".
La distribución de la ayuda alimenticia en Irak se hace más perentoria a medida que avanza la guerra, especialmente en la zona sur del país, donde comienza a apretar el calor y escasea el agua, ingredientes que agudizan el drama humanitario.
Responsables de las asociaciones de asistencia han advertido que la situación empeorará con la llegada del verano si no se hacen llegar urgentemente alimentos, medicinas y agua a la población iraquí, que en un 60 por ciento depende del programa de la ONU "Petróleo por Alimentos".
Los intentos realizados hasta la fecha por la Media Luna Roja y el Ejército anglo-norteamericano en las "zonas aseguradas" de Safwan y Um Qasar, e incluso en la sitiada Basora, han sido poco efectivos, debido sobre todo a la falta de infraestructuras.
La entrega de provisiones y medicinas ha provocado peleas entre la población, y ha llegado a enfrentar a familias.
Todas las agencias de la ONU retiraron a sus trabajadores de Irak pocos días antes de que Estados Unidos y el Reino Unido lanzaran la campaña bélica contra el régimen de Bagdad.
Esta estampida ha creado un vacío rellenado de forma apresurada por voluntarios sin la formación suficiente y por soldados que no están familiarizados con estas tareas, señaló el responsable de una organización internacional.
Larry Thompson, director de la organización británica Refugiados Internacionales, cree, además, que las administraciones de Estados Unidos y el Reino Unido "no se han preparado lo suficiente" para abordar este problema.
Antes de que comenzara la guerra, los estrategas bélicos preveían que detrás de las tropas entraran en territorio iraquí las agencias humanitarias, que tendrían su base de operaciones en el vecino Kuwait.
Hasta la fecha, sólo una Organización No Gubernamental (ONG) se ha registrado en Kuwait -aunque otras también lo han solicitado- y la ONU trabaja en difíciles condiciones.
Además, las ONG norteamericanas se han negado a operar bajo las órdenes del Pentágono.
En un comunicado hecho público hoy en EE.UU., la organización "InterAcion" -alianza que cobija a 160 grupos de ayuda estadounidenses-, expresó su preocupación sobre la intención de distribuir la asistencia humanitaria a través del Ejército.
"Los esfuerzos del Departamento de Defensa para marginar el papel del Departamento de Estado y obligar a las ONG a operar bajo el Pentágono complica la labor de ayuda al pueblo iraquí", explica el documento.
En este ambiente, en los próximos días llegará el primer contingente español de ayuda humanitaria al puerto de Um Qasar, en el que se trabaja para limpiar las aguas de minas.
La ayuda viaja a cargo del buque de desembarco anfibio "Galicia" y del petrolero "Marqués de la Ensenada", que el martes hizo una parada técnica en el puerto de Yibuti, en el cuerno de Africa.
El envío será distribuido por los 900 militares que viajan a bordo de los barcos.
Sin embargo, la decisión del Ministerio de Defensa de no enviar una unidad de apoyo logístico, impedirá que las tropas puedan adentrarse en el país.
Los buques llevan en sus bodegas 20 toneladas de ayuda humanitaria, equipos y maquinaria que fueron trasladados el martes a Yibuti en dos aviones "Iliushin" bielorrusos, fletados por el Ministerio de Defensa.
