BASE AS SAYLIYAH.- Unos cincuenta tanques y vehículos blindados norteamericanos ingresaron por unas tres horas en el corazón de Bagdad, en una nueva aplicación de las "tácticas flexibles" diseñadas por el general Tommy Franks.
Una serie de imprecisos "objetivos" fueron capturados en varias zonas de la ciudad y nuevos sitios norteamericanos se crearon en el área suroccidental. Fuentes del comando central en Qatar dijeron que las operaciones secretas apuntaron también a zonas en el norte y noroeste de la ciudad.
El escenario militar que emerge de una de las más confusas jornadas desde el inicio de la guerra es el de una ciudad que está a punto de ser rodeada sin darse del todo cuenta.
"El objetivo es esencialmente el aislamiento -dijo el general norteamericano en Qatar, Victor Renuart-, seguiremos con nuestras fuerzas operando alrede
las fuerzas enemigas entrar y desafiarnos".
La parte más vistosa y espectacular de las operaciones en Bagdad fue un raid sorpresivo lanzado al alba, que utilizó los tanques Abrams M1A1 y los Bradley de la Segunda Brigada de la Tercera División de infantería dentro de la capital.
a presencia de la televisión estadounidense más una serie de declaraciones de voceros del comando central en Qatar ("estamos en el centro de Bagdad, nos dirigimos al corazón de la ciudad") concentró toda la atención sobre el operativo de los blindados, acompañados por acciones esporádicas de las fuerzas iraquíes.
La operación "fue una clara señal al régimen de que podemos movernos a nuestro gusto, incluso en las calles de la capital", dijo Renuart en la Base As Sayliyha.
Con el pasar de las horas, emergió claramente que la ofensiva aliada en la ciudad, acompañada con ataques a un Palacio presidencial de Saddam Hussein y momentos de duros combates, no fue la única operación del día y quizás ni siquiera la más importante ordenada por el general Tommy Franks.
Las fuerzas especiales entraron en acción en otras partes de la ciudad y fueron capturados "objetivos" en zonas lejanas como la periferia en el norte y noroeste de la ciudad.
En el sudeste, además, los marines conquistaron terreno y crearon una base en la periferia de la ciudad, después de batallas en las cuales aparecieron por primera vez combatientes de origen egipcio, jordano y sudanés.
Los blindados que alcanzaron el Tigris dentro de Bagdad fueron desviados al oeste hacia el aeropuerto para reunirse con la Primera Brigada de la Tercera División y continuar luego al sur para volver al punto de partida, periferia sur, después de haber realizado en práctica un cerco.
Los soldados norteamericanos en Bagdad aún son pocos, posiblemente menos de 3 mil, pero crecen en número con el continuo arribo de refuerzos desde el sur.
Alrededor de la ciudad permanecen varias unidades del Quinto Cuerpo de armada (que tiene activos en la zona a la Tercera División de Infantería y a las 101 y 82 aerotransportada) y la primera fuerza de Expedición de marines.
En varios puntos de la ciudad además trabajan fuerzas especiales, que entre sus objetivos deberían tener también las centrales eléctricas y el acueducto urbano.
"Nosotros no cortamos la energía eléctrica en Bagdad -dijo sin embargo el general Renuart- absolutamente no queremos golpear a los ciudadanos. Sabemos dónde están las centrales eléctricas y haremos de todo para recuperar la normalidad".
El comandante de la Fuerza aérea norteamericana en el Golfo, general Michael Moseley, informó en tanto que la entera flota de jets y aviones sin piloto está desde hoy en alerta las 24 horas para operaciones de asistencia aérea a los combates urbanos.
La idea, desarrollada hace tiempo por los estrategas del Pentágono, es ayudar a las fuerzas de tierra recurriendo siempre menos a las gigantescas y peligrosas bombas con guía satelital y más a las pequeñas bombas con guía laser, conducidas por pilotos sobre objetivos también de dimensiones reducidas como autos y furgonetas.