SOZ BLAKH.- Los aviones estadounidenses atacaron posiciones iraquíes cerca de Mosul y Kirkuk, mientras las fuerzas que apoyan a los combatientes kurdos tomaron posiciones en la tierra de nadie al sur de la región autónoma kurda.
La combinación de ataques aéreos estadounidenses y la ofensiva terrestre kurda en el norte ha hecho retroceder a las fuerzas del gobierno iraquí desde las fronteras kurdas hacia los dos principales distritos del norte todavía en control de Bagdad: el centro comercial de Mosul y el importante centro petrolero en torno de Kirkuk.
Los kurdos están ahora a unos 30 kilómetros de una y otra ciudad.
El ministro de información iraquí, Mohammed Saeed al-Sahhaf, desestimó el sábado los avances kurdos en una declaración a la telemisora árabe Al Yazira.
"No nos preocupa en absoluto", afirmó.
En el sudeste, donde la región autónoma discurre junto a la frontera con Irán y llega hasta a 160 kilómetros de Bagdad, los combatientes kurdos se han ido concentrando a lo largo de la frontera a corta distancia de la ciudad petrolera de Khanaqin.
Las fuerzas especiales estadounidenses se les sumaron, al parecer para brindarles el tipo de apoyo que tienen en el norte.
Las fuerzas kurdas sobre la frontera sur han aumentado de menos de 400 hace varias semanas a entre 1.500 y 1.800. Mola Bakhtiyar, un líder político y militar kurdo, dijo que se elevará pronto a unos 3.000.
"Si yo tuviese 10.000 Kalashnikovs, tendría 10.000 combatientes más", dijo refiriéndose al fusil favorito en la región.
Los kurdos, oprimidos por el régimen de Saddam, establecieron una región autónoma en el norte en 1991 bajo la protección de las patrullas aéreas estadounidenses y británicas.
En el noroeste cerca de Mosul, los aviones estadounidenses atacaron sostenidamente el sábado posiciones iraquíes en las afueras del pueblo de Khazer, donde los curdos habían capturado un puente estratégico el viernes.
Un largo convoy de fuerzas aerotransportadas estadounidenses tomó posiciones a 15 kilómetros al este de Khazes y a 5 kilómetros al este de Kalak, donde los iraquíes habían abandonado el jueves una posición.
Los 25 vehículos transportaron a unos 250 soldados, una quinta parte de los paracaidistas que se lanzaron en la región kurda el 26 de marzo.