MADRID.- El cadáver del cámara de la cadena de televisión Telecinco José Couso, muerto en Bagdad por el disparo de un tanque estadounidense, llegaron esta madrugada a la base aérea militar de Getafe, en Madrid, en un avión Hércules del Ejército español.
El féretro llegó acompañado por su compañero en las tareas informativas en la guerra en Irak, el periodista Jon Sistiaga.
En la base aérea esperaban sus hermanos, Javier, David, María Isabel y Bárbara, y su viuda, Dolores Jiménez, así como un numeroso grupo de amigos y compañeros de Telecinco.
Momentos antes de la llegada del aparato, procedente de Kuwait City, con una escala en El Cairo, una multitud de amigos y familiares se congregó en el pabellón de llegadas de la base aérea, donde reinaban el silencio y la conmoción.
Muchos compañeros del trabajo y amigos portaban pegatinas con la imagen de Couso, bajo la cual se leía: "José Couso. Asesinado".
Tras un responso, el féretro fue introducido entre aplausos en el vehículo funerario en el que ha sido trasladado a un tanatorio madrileño, donde ha quedado instalada la capilla ardiente.
Por otro lado, el cadáver del periodista español Julio Anguita Parrado, muerto en Irak por un misil iraquí, se encuentra en Austria, a donde llegó el viernes desde Kuwait, a la espera de que se le practiquen unas pruebas forenses.
Se espera que su repatriación pueda ser llevada a cabo el lunes, según informó la alcaldesa de Córdoba de donde el informador era originario.