ANKARA.- El ministro de Relaciones Exteriores Abdalá Gul dijo el lunes que la guerra encabezada por Estados Unidos debe ser confinada a Irak e insistió que Siria no debe ser el nuevo blanco de las armas estadounidenses.
El Presidente estadounidense George W. Bush advirtió el domingo a Siria que no debe dar asilo a los líderes del régimen iraquí y acusó a Damasco de poseer armas químicas. Sin embargo, Washington ha evitado amenazar por el uso de la fuerza militar contra el régimen sirio.
"Esta guerra debe concluir en Irak", dijo Gul en conferencia de prensa conjunta con el ministro israelí de Relaciones Exteriores Silvan Shalom. "A nuestro parecer, nadie debería permitir nuevos conflictos que agiten la región".
Sin embargo, Shalom puso en entredicho el papel de Siria en la guerra de Irak y señaló que Damasco "debe explicar por qué permitió la huida a su territorio de esos funcionarios iraquíes".
El ministro israelí acusó además a Siria de albergar organizaciones terroristas.
Siria ha negado que ayudara al liderazgo iraquí y dice que no tiene armas de destrucción masiva.
Israel y Turquía son aliados de Estados Unidos, pero mientras el gobierno israelí apoyó la guerra de Estados Unidos y Gran Bretaña contra Irak, Turquía no cooperó como había esperado Washington.
Turquía, una nación mayoritariamente musulmana, es la única amiga cercana de Israel en la región y para Ankara, los israelíes son importantes socios comerciales. La relación es también un símbolo importante de la orientación occidental turca, deseosa de entrar en la Unión Europea.
Los lazos entre los dos países son cruciales para Washington, que considera a Turquía un ejemplo democrático de cara a las naciones musulmanas.
"Israel y Turquía tienen, como democracias de la región, valores comunes, y enfrentan desafíos comunes", dijo Shalom a su llegada a Ankara.
Shalom se reunirá con el presidente Ahmet Necdet Sezer y con el Primer Ministro Recep Tayyip Erdogan.