GINEBRA.- La Comisión de Derechos Humanos de la ONU condenó hoy por primera vez a Corea del Norte, -único país del mundo cuyo régimen proclama abiertamente los principios del estalinismo- por sus "violaciones graves, sistemáticas y extendidas de los derechos humanos", en virtud de una resolución aprobada por 28 votos a favor, 14 abstenciones y 10 votos en contra.
Esta primera votación contra Corea del Norte, desde que fue creada la comisión en 1946, se produce en un momento especialmente delicado, cuando Pyongyang parece haber moderado su postura en su confrontación con Estados Unidos, originada por su programa nuclear.
Corea del Sur, presente en la sala, no participó en la votación.
El texto, presentado por la Unión Europea (UE), denuncia las ejecuciones, las torturas, los tratos inhumanos, "la existencia de gran número de campos de detención, el recurso muy extendido a los trabajos forzados y la falta de respeto de los derechos de los prisioneros".
La resolución denuncia también "las severas y omnipresentes restricciones de las libertades de pensamiento, religión, opinión, expresión, reunión y asociación, y del acceso de los ciudadanos a la información, y las limitaciones impuestas a los ciudadanos que quieran desplazarse libremente por el país o viajar al extranjero".
La resolución pide a la comunidad internacional que exija que la asistencia humanitaria "se distribuya conforme a los principios humanitarios" y que "asegure el respeto de los principios fundamentales del asilo" para los norcoreanos que huyen al extranjero.
Además, exige que las organizaciones defensoras de los derechos humanos tengan "acceso libre y sin trabas" a ese país.
Entre los países que respaldaron la resolución europea figuran Estados Unidos, Japón, Australia, Brasil, Canadá, México, Argentina y Arabia Saudita. Votaron en contra China, Rusia, Cuba, Malasia y Vietnam, y se abstuvieron India, Pakistán y Tailandia.
El gobierno surcoreano manifestó hoy que su intención es de evitar ofender a su vecino del norte. "En el momento en que se intenta resolver urgentemente la cuestión nuclear, nos preocupa que pueda resultar indeseable provocar públicamente a Corea del Norte", había declarado el portavoz del ministerio surcoreano de Relaciones Exteriores Kim Sun-Heung, antes de la votación en Ginebra.
