LA HABANA.- Más de 160 intelectuales y artistas de todo el mundo, incluidos cuatro Premios Nobel, suscribieron un manifiesto de condena a Estados Unidos y de solidaridad con Cuba, presentado hoy en La Habana durante el acto central del Primero de Mayo. El documento, leído por el intelectual mexicano Pablo González Casanova ante cientos de miles de personas congregadas en la Plaza de la Revolución de la capital cubana, está suscrito, entre otros, por los Premios Nobel Gabriel García Márquez, Rigoberta Menchú, Nadine Gordimer y Adolfo Pérez Esquivel. Dirigido a la "conciencia del mundo", el manifiesto denuncia que la guerra de Irak ha tenido como consecuencia el "quebranto del orden internacional". "Una sola potencia agravia hoy las normas de entendimiento entre los pueblos. Esa potencia invocó una serie de causas no verificadas para justificar su intervención, provocó la pérdida masiva de vidas humanas y toleró la devastación de uno de los patrimonios culturales de la humanidad", agrega el texto. "Nosotros sólo poseemos nuestra autoridad moral y desde ella hacemos un llamado a la conciencia del mundo para evitar un nuevo atropello a los principios que nos rigen", añade. Dice que "hoy existe una dura campaña en contra de una nación de América Latina. El acoso de que es objeto Cuba puede ser el pretexto para una invasión". "Frente a eso, oponemos los principios universales de soberanía nacional, de respeto a la integridad territorial y el derecho a la autodeterminación, imprescindibles para la justa convivencia de las naciones", concluye el documento. El texto está firmado por 166 intelectuales y artistas, entre los que figuran los escritores Eduardo Galeano, Mario Benedetti, Ernesto Cardenal y Luis Sepúlveda. Además, suscriben el manifiesto el bailaor español Antonio Gades, y los artistas norteamericanos Harri Belafonte y Dani Glover, y la presidenta de las Madres de la Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, entre otros. Acto de conmemoración El presidente Fidel Castro encabeza los actos por el Día Internacional de los Trabajadores que se realiza en la Plaza de la Revolución de La Habana, colmada por decenas de miles de cubanos que prometen hacer de la de hoy una de las mayores movilizaciones de su historia. Al inicio del acto, el secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), Pedro Ross, llamó a defender la soberanía e independencia del país, amenazada según las autoridades de la isla por una serie de maniobras orquestadas por Washington. El dirigente manifestó el compromiso de los cubanos "como nunca antes por hacer fuerte, unida e invencible a nuestra patria" y el empeño de fortalecerse "en la capacidad de defendernos en cualquier circunstancia siempre con las armas de la razón y hasta con las uñas si fuera necesario". "Con Fidel, con el partido, con las justas ideas de la revolución no habrá fuerza sobre la tierra capaz de someternos o doblegarnos", aseguró Ross.
