BINGOL, Turquía.- Violentos enfrentamientos opusieron este viernes en Bingol (este) a las fuerzas del orden con víctimas del sismo que causó 105 muertos y 499 heridos en Turquía, según balance provisional oficial.
El jefe de la policía local, Nuri Ozdemir, fue destituido inmediatamente después de los incidentes por orden del ministro de Interior, Abdulkadir Aksu.
Los disturbios empezaron cuando varios cientos de personas se reunieron ante el edificio del gobierno local para pedir tiendas y ayuda por el terremoto.
Un vehículo policial quiso abrirse paso a toda prisa e hirió a dos personas de la muchedumbre, que replicó arrojando proyectiles, según la prensa.
Soldados y policías dispararon luego tiros al aire para dispersar a la gente que profería eslóganes antigubernamentales.
Los manifestantes en un primer tiempo se replegaron pero luego volvieron a la carga para atacar a los policías y sus vehículos con palos y piedras.
"¡Policía asesina, policías fuera!", gritaba la gente.
Las relaciones entre la población, mayoritariamente kurda, y las fuerzas del orden son tensas desde hace mucho tiempo, debido a los incidentes provocados por la rebelión separatista armada de la región.
Un diputado que seguía las operaciones de socorro estimó que los enfrentamientos eran obra de "provocadores".
El Primer Ministro, Recep Tayyip Erdogan, estimó -en una declaración televisada del viernes- que las fuerzas del orden habrían "tenido que tomar en cuenta las realidades sicológicas y sociales de la población".
Los manifestantes reclamaron tiendas luego de que las autoridades aconsejaron a la gente que no volviera a sus casas arruinadas debido a las numerosas réplicas que siguieron al terremoto de primera hora del jueves que alcanzó una magnitud de 6,4 grados en la escala de Richter.
Un internado en la proximidad de Bingol, se derrumbó. Allí dormían unos 180 niños, de los cuales 80 fueron rescatados el viernes por la mañana sanos y salvos.
El viernes continuaban en el internado las operaciones de socorro, pero las esperanzas de encontrar en vida a los niños atrapados bajo los escombros disminuían al tiempo que se preparaban fuertes medios para despejar una parte de las ruinas.
Un total de 42 cuerpos fueron recuperados en la mañana del viernes de los escombros del establecimiento escolar, alrededor del cual se congregaban muchos padres y familiares que esperaban con angustia noticias de sus niños.